Aena cae de nuevo en Bolsa casi un 2,6% afectada por la posible cogestión del aeropuerto de El Prat

MADRID 1 Ago. (EUROPA PRESS) -

Aena cierra una jornada más en rojo en el selectivo Ibex 35 de la Bolsa madrileña a la espera de una posible cogestión con la Generalitat de Cataluña del aeropuerto de El Prat en Barcelona.

El gestor aeroportuario cerró la sesión bursátil de este jueves con una nueva caída de sus títulos del 2,57% hasta llegar a 170,6 euros, siendo uno de los valores más castigados del Ibex 35. No obstante, esta caída es inferior a la registrada durante los días previos, cuando el descenso llegó a ser del 6,21%.

En los últimos cinco días, el gestor aeroportuario español dirigido por Maurici Lucena acumula una caída cercana al 7,33% y en el último mes la caída se eleva hasta el 9,35%.

Pese a ello, en lo que va de año la revalorización de la compañía se sitúa en el 3,90%, desde los 164,20 euros con los que comenzó a cotizar el 2 de enero.

La propuesta de un nuevo modelo de gobernanza para los aeropuertos catalanes, incluida en el preacuerdo de investidura entre PSC y ERC, ha llevado a la compañía a registrar importantes caídas en el precio de sus acciones a lo largo de la semana.

El pacto de investidura entre ERC y PSC que podría afectar al gestor aeroportuario español incluye un 'Consejo Rector Aeroportuario' entre Generalitat y Estado. Esta es una decisión que preocupa a la empresa cotizada, que se ha puesto en alerta asegurnado que hará un "seguimiento pormenorizado" del acuerdo.

Socialistas y republicanos estarían planteando la introducción de un llamado Consejo Rector Aeroportuario de Cataluña (CRAC) en sustitución del actual comité de coordinación aeroportuaria (CCA). Hasta ahora este último órgano ha tenido una labor meramente informativa y se desconoce si con el acuerdo pasará a tener un papel más ejecutivo en la gestión de la infraestructura catalana, el mayor aeródromo catalán y el segundo en volumen de tráfico de la red de Aena.

La introducción de este organismo sigue la línea con una de las mayores reivindicaciones del nacionalismo en el ámbito de las infraestructuras: la gestión directa o, al menos, la cogestión del aeropuerto de El Prat.

Según ha trascendido, el preacuerdo de investidura de ERC y PSC prevé "transformar" el aeropuerto de Barcelona para que gane capacidad con nuevas conexiones intercontinentales de largo radio, para lo que se dará continuidad a la labor de la comisión técnica acordada entre Generalitat y Gobierno.

Así, ambas formaciones acuerdan que "el conjunto del sistema aeroportuario de Cataluña merece una modernización que fomente un mayor equilibrio territorial que corrija la excesiva especialización del aeropuerto de Barcelona-El Prat en vuelos cortos punto a punto, en favor de una mayor conectividad de largo radio".

El preacuerdo reclama "determinar las características del futuro sistema aeroportuario catalán, que incorporará los roles que también deben tener los aeropuertos de Girona, Reus y Sabadell, y Lleida-Alguaire".

Está prevista, asimismo, la creación de la Autoritat Aeropòrtuaria de Catalunya que "vehiculará los intereses de Catalunya en el nuevo modelo de gobernanza" y centralizará las competencias propias de la Generalitat relacionadas con esta actividad

El consejero delegado de Aena, Maurici Lucena, aseguraba este miércoles que Aena "defenderá sus intereses". "Analizaremos en detalle (el texto del acuerdo) con todos nuestros recursos y también contrataremos a los mejores expertos legales porque es nuestro trabajo. Es todo lo que puedo decir por ahora", respondía el directivo ante las reiteradas preguntas de los analistas durante la presentación de resultados semestrales de la compañía.

Lucena, muy vinculado al PSC, partido en el que fue elegido número dos de la lista por Barcelona en las elecciones al Parlamento de Catalunya de 2012, ha asegurado en reiteradas ocasiones que la defensa de los intereses de la compañía es lo único que guiará sus acciones futuras.

De momento, el consejo de administración de Aena se ha puesto en alerta y ha manifestado que realizará un "seguimiento pormenorizado" de las decisiones que en el futuro pudieran desarrollar el marco de este acuerdo, para, en su caso, "analizar sus eventuales efectos para la sociedad".