PARÍS, 11 Dic. (EUROPA PRESS) -
El director general de Airbus, Fabrice Bréguier, advirtió este viernes a los siete Estados que participan en el programa A400M, entre ellos España, de que tendrán que asumir un incremento "significativo" en el precio acorde con el mercado, al igual que el constructor cumplirá con su parte de los riesgos, que insistió "deben ser compartidos", pero confió en alcanzar un acuerdo sobre el coste adicional antes de finalizar el año.
En una entrevista al diario francés 'La Tribune', coincidiendo con el día del primer vuelo del avión militar desde la factoría de Airbus en Sevilla, Bréguier aseguró que "los Estados tendrán que aceptar un precio más alto, aumento que no será del orden de un 3%, sino significativo".
Preguntado sobre la posibilidad de abandonar el programa si no se llega a un acuerdo, el ejecutivo se mostró confiado en alcanzar un acuerdo antes de finalizar el año respecto al reparto de los costes adicionales del programa. "Es posible", indicó Bréguier, quién deseó que con el primer vuelo de hoy, "un hito para el programa", sirva para facilitar la negociación y restablecer la confianza de los clientes.
El programa del A400M, que acumula un retraso de más de tres años, ha supuesto un coste adicional de 5.500 millones de euros, un 25% más que la partida prevista inicialmente, para cuya financiación Airbus provisionó 1.760 millones de euros, al igual que los constructores del motor, que ampliaron capital por valor de 124,4 millones, o la proveedora electrónica Thales, que provisionó 60 millones de euros.
"Airbus se enfrenta a una situación particularmente difícil, con una crisis en las aerolíneas sin precedentes, pero estamos haciendo grandes esfuerzos financieros para desarrollar el A350", indicó. Al respecto, afirmó que EADS tendrá que garantizar que el A400M no gravará la capacidad de Airbus para seguir siendo competitivo.
Pese a reconocer que "durante mucho tiempo EADS y Airbus no supieron ejecutar el programa del A400M con el máximo rigor", asumiendo su parte de responsabilidad, indicó que se ha reajustado el calendario de entrega de los aviones que se ha pospuesto hasta 2013, cuyas primeras entregas serán para Francia.
En esta línea, aseguró que durante el primer año, el ritmo de producción será de 30 aeronaves al año, con una tasas de ejecución de un avión cada tres meses.
A380 Y A350.
Por otro lado, y en relación al A380, el director general de Airbus reconoció que se trata de un programa "difícil", que todavía no ha alcanzado la "velocidad de crucero" esperada. No obstante, recordó que los primeros seis aviones del 'superjumbo' se entregarán entre finales de este mes y principios de enero. Para 2010, se han programado 20 entregas.
Sobre el A350, admitió que será difícil entregar la primera aeronave en 2013, ya que la producción se iniciará "en unos 18 meses" y las primeras pruebas del vuelo a partir de 2012.
Finalmente, descartó que Airbus vaya a reducir sus tarifas el próximo año, ya que existe una "muy buena visibilidad" durante el primer semestre de 2010 y para el resto del año. "Vamos a mantener nuestro ritmo de producción", afirmó, para insistir que la compañía está cerca de cerrar el año cumpliendo sus objetivos de 489 entregas y 300 pedidos. "Estamos en 225 y aún nos quedan dos semanas", concluyó.