Entre el 30 y el 35% de los viajeros que usan los trenes de alta velocidad y larga distancia de Renfe lo hacen por motivos laborales
MADRID, 19 Dic. (EUROPA PRESS) -
Viajar en tren ha dejado de ser tan solo un sinónimo de turismo. La movilidad vacacional es una de las grandes fortalezas de Renfe y más aún, desde la llegada de la alta velocidad. Sin embargo, cada vez surgen más viajeros que optan por este medio de transporte para ir a sus puestos de trabajo y que lo incluyen en sus jornadas laborales, ya que aprovechan el tiempo a bordo para conectarse.
Viajar hasta el centro de la ciudad evitando otros medios de transporte adicionales, la rapidez y dejar atrás los trámites de la facturación o de los controles que conllevan los aeropuertos son algunas de las ventajas que destacan los usuarios. A todas ellas hay que sumar la satisfacción por contar con un tren a primera hora de la mañana, que permite llegar a Madrid a tiempo para reuniones corporativas o para comenzar temprano la jornada laboral.
Renfe tiene una extensa red de alta velocidad que une diferentes puntos de la península, como Barcelona, Sevilla, Galicia, Asturias o Valencia, con la capital de manera rápida y cómoda y que ha impulsado la movilidad empresarial y el nacimiento de nuevos modelos laborales como el teletrabajo y de un nuevo tipo de trabajadores que optan por trabajar en una región y vivir en otra.
La extensión del uso del tren por motivos laborales es una realidad. De hecho, según datos de Renfe, aproximadamente entre el 30 y el 35% de los viajeros que usan los trenes de Alta Velocidad y de Larga Distancia lo hacen por motivos laborales, una cifra que se sitúa en torno a un 40-45% en los trenes Avant.
En el caso de Asturias, una de las últimas comunidades en sumarse a la alta velocidad de Renfe, la llegada del AVE ha supuesto un recorte en los tiempos de viajes de aproximadamente una hora.
Además, la puesta en servicio de los nuevos trenes S106, con capacidad para más de 500 viajeros, ha ayudado a que, desde el 30 de noviembre de 2023, cerca de 900.000 clientes se hayan movido en los trenes de Renfe con origen o destino Asturias, lo que supone un 115% más de viajeros que el año pasado.
Los nuevos trenes han ayudado a aumentar el confort de los viajeros; contar con más frecuencias, ya que las circulaciones han aumentado un 14,6%; así como a mejorar los precios. Además, se ha registrado un aumento del 75% en el número de plazas, ha crecido la ocupación de los trenes y se han puesto en servicio nuevos destinos, como el del Alvia de Avilés.
UN VIAJE EN "FAMILIA"
En el primer tren de alta velocidad de la mañana que cubre la línea Gijón-Madrid, el inicio del viaje es relajado y tranquilo. Los viajeros aprovechan los primeros momentos para dormir un poco, escuchar música y leer las noticias en el móvil.
Cuando empieza a amanecer las mesitas plegables de los asientos se llenan de ordenadores y comienza la jornada laboral, porque una de las ventajas que los usuarios destacan del tren es la posibilidad de sumar las horas del trayecto a su jornada laboral.
En la cafetería huele a café y croissants calientes. Con leche, cortado o solo. Los cafés salen de la máquina uno tras otro y el personal de abordo no para, sobre todo después de recoger a gente en paradas, como León o Valladolid, según relatan los propios trabajadores.
"Aquí somos una familia", afirma Mª Paz Pérez López, interventora de Renfe desde 1982, que relata que el primer tren de la mañana que hace el recorrido entre Asturias y Madrid suele ir prácticamente lleno.
A lo largo de los años ha cambiado su trabajo, pero también el perfil del usuario que opta por el tren como principal medio de transporte. Antes predominaba el "viajero familiar" y ahora no se conoce tanto a la gente, relata Pérez, quien aprecia un aumento de las personas que apuestan por el tren para ir a trabajar a Madrid.
Es el caso de Humberto Sánchez, un viajero de Gijón, con base laboral en Asturias que suele tener habitualmente reuniones de trabajo en Madrid. Opta por coger el primer tren del día, que arranca de Gijón a las 05:58 horas y llega a Chamartín- Clara Campoamor a las 09:37 horas.
En Gijón también se sube Javier Torre, que viaja a la capital cada quince días y suele hacer noche en Madrid. Madrileño de nacimiento, ahora teletrabaja desde Gijón y también opta por coger el tren más madrugador que, además, "es muy cómodo" y le deja "en el centro".
LA IMPORTANCIA DEL TREN MADRUGADOR
La oferta de primera hora es uno de los aspectos más valorados por los usuarios. Así le sucede a Mónica, que todas las semanas hace el recorrido León-Madrid por razones laborales. Va trabajando con su ordenador y apuesta por el tren, porque el viaje se alarga solo dos horas frente a las tres y media que le supondría ir en autobús o en coche particular.
María González, viajera que se sube en Oviedo, es novata en el uso de este medio de transporte para hacer un viaje de ida y vuelta en el día, ya que hasta ahora solía optar por el avión. Sin embargo, el tren le aporta "comodidad" y tiempo. "Ahorras tiempo y dinero", señala González, que trabaja en el sector de la energía y destaca la importancia de poder salir a primerísima hora.
Con el mismo propósito, pero en otro punto de España, Elvira se levanta temprano para hacer el viaje Valencia-Madrid en el día. Tiene una reunión en Madrid y opta por el tren, ya que le resulta "muy cómodo" y rápido. Además, la estación está cerca de su casa y del trabajo y cuando llega a Madrid no le resulta complicado el trayecto. Un plus es el vagón silencio que le permite estar más relajada o ir trabajando.
A Carlos Agúndez, oriundo de Medina del Campo, el tren le ha permitido dejar atrás el asfalto de Madrid y volver a casa. Ahora ha fijado su residencia en su ciudad y, según indica, los trayectos de ida y vuelta en tren le han brindado la oportunidad de ganar tiempo para la lectura y sus hobbies.
Víctor Pacheco, por su parte, sube al tren en Salamanca y hace en trasbordo en Valladolid. Es un viajero "bastante esporádico", pero ha elegido el tren para ir a Madrid a un congreso de jóvenes empresarios por "lo rápido que es y la conveniencia de horarios", ya que va y vuelve en el mismo día.