MADRID 13 (EUROPA PRESS)
Analistas financieros han advertido de que si Grecia quiebra, el problema será "la honda expansiva que tendría en España e Italia", ya que aumentaría la prima de riesgo y ninguno de los dos países "podría asumir una rentabilidad tan alta a la hora de emitir deuda".
En declaraciones a Europa Press Televisión, Soledad Pellón, estratega de Mercados de IG Markets, ha asegurado que existe temor "cada vez más real" de que Grecia "quiebre", debido a que no se ha aprobado el segundo rescate para el país, que le permitiría pagar a los acreedores. "A Grecia le queda un tiempo limitado. Hay bastantes discrepancias en el seno de la Unión Europea", ha señalado.
Pellón ha asegurado que España e Italia "no han necesitado un rescate", aunque ha matizado que la compra de bonos de estos dos países por parte del Banco Central Europeo para controlar la prima de riesgo ha sido "un rescate encubierto".
También ha recordado que son los bancos franceses y alemanes "los principales tenedores de deuda griega"; por tanto, en días de fuertes bajadas, "son los que se apuntan los principales recortes". Este sería el motivo principal por el que la repercusión directa de una quiebra de Grecia afectaría "de manera instantánea a Francia y a Alemania"; mientras que a España "llegaría por efecto contagio".
EMISIÓN DE EUROBONOS
En cualquier caso, según IG Markets, la solución pasaría, por una política "común". Ahora mismo, la principal discrepancia entre los países europeos es la emisión de eurobonos. Para afrontar esta crisis una unión fiscal "sería lo ideal", según analistas.
En el caso de que Grecia saliera de la zona euro, sería "positivo" para el país heleno, ya que podría efectuar una política de devaluación de su moneda, lo que le permitiría ganar competitividad con respecto al resto de países de la UE. Una decisión que no puede tomar ahora, ya que pertenece a una moneda común, ha precisado.
Pellón ha descartado que en ese hipotético escenario Grecia sufriera una situación parecida a la que ocurrió en Argentina con el llamado 'corralito', pero el temor estaría en que el pánico se adueñara de la población y todo el mundo sacara sus ahorros. "Ahí es cuando verdaderamente los bancos no podrían hacer frente a sus obligaciones", ha dicho.
En los próximos días, ha aseverado que se espera "tensión máxima" en las bolsas de todo el mundo. Mientras no se apruebe el segundo rescate griego por parte de la UE, se seguirá viendo un mercado "muy negativo, preso del pánico". "Por ahora no se espera que haya un atisbo de esperanza importante", ha concluido.