OVIEDO, 17 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Asturias ha expresado este viernes su "enorme satisfacción" por la aprobación, por parte de la Comisión Europea, de unas ayudas de Estado de 460 millones de euros para apoyar el proyecto de descarbonización de ArcelorMittal en sus instalaciones de cabecera de Gijón.
Según han explicado desde el Principado a través de una nota de prensa, las autoridades comunitarias, de esta manera, autorizan la notificación presentada por el Gobierno de España para favorecer la producción de acero verde en Asturias, para cuya ejecución es necesario disponer de respaldo por parte del Ejecutivo central de cara a facilitar el proceso de transición ecológica de la siderurgia integral.
Para el consejero de Industria, Empleo y Promoción Económica de Asturias, Enrique Fernández, esta "buena y muy esperada noticia" avala el compromiso del Gobierno de España por la continuidad, a medio y largo plazo, de la siderurgia como una de las actividades industriales tractoras para la economía asturiana.
"Se trata de un hito que permite a partir de ahora disponer de un horizonte más despejado para que Asturias puede empezar a producir acero limpio y para que ArcelorMittal pueda desarrollar su actividad durante muchos años más en Asturias", ha asegurado el consejero.
"Esta decisión llega tras un intenso trabajo político y administrativo de varios años, que en primer lugar pasó por convencer a la familia Mittal de que Asturias era el destino ideal para realizar estas inversiones, y una vez logrado ese objetivo hubo que trasladar a la Unión Europea la petición de que concediese la autorización para dar apoyo financiero a la compañía en sus planes de descarbonización", ha añadido el consejero.
NUEVO HORNO ELÉCTRICO
La ayuda europea que recibirá ArcelorMittal tiene como objetivo reducir la dependencia de los combustibles fósiles en sus procesos productivos.
Con los 460 millones de euros de subvención directa a la compañía, se financiará la construcción de una planta directa de mineral de hierro con hidrógeno verde que contará con una capacidad de producción de 2,3 millones de toneladas anuales, complementada con un horno eléctrico híbrido de 1,1 millones de toneladas de capacidad. La nueva planta sustituirá, junto con un nuevo horno de arco eléctrico, al alto horno actual.
El gas natural utilizado actualmente en la mezcla se eliminará gradualmente de los procesos de producción de acero. Se prevé que comience a operar a fines de 2025 y evite la liberación de 70,9 millones de toneladas de dióxido de carbono. Las ayudas a ArcelorMittal se articularán a través del Perte de la Descarbonización que fue presentado en Gijón por la ministra de Industria, Reyes Maroto, y por el presidente del Principado, Adrián Barbón.