En su primer mes tras convertirse en la primera vía que suprime el pago y vuelve al Estado
MADRID, 27 Ene. (EUROPA PRESS) -
El tráfico de la autopista AP-1 Burgos-Armiñón se disparó un 58,7% el pasado mes de diciembre, el primero en el que la vía no cobro peaje tras convertirse en la primera autopista de España en levantar las barreras al concluir su contrato de concesión y pasar a manos del Estado.
La vía contabilizó una media de 26.516 vehículos diarios durante el último mes de 2018, frente a los 16.703 que registró el mes previo, el de noviembre, el último en el que cobró peaje, según datos oficiales del Ministerio de Fomento.
La comparativa con el año anterior arroja un crecimiento del 40%, dado que en diciembre de 2017 la intensidad media diaria de tráfico de la autopista se situó en 18.899 vehículos.
En el caso concreto de los camiones, el aumento de tráfico es aún mayor, del 68,6%. Una media de 6.400 vehículos pesados transitaron cada día por la vía en diciembre, frente a los 3.794 que lo hicieron en noviembre.
La AP-1 se convirtió el pasado 1 de diciembre en la primera autopista del país que suprimió sus barreras de peaje al concluir el contrato de concesión que tenía la empresa que la construyó para explotarla y recuperar así la inversión que realizó en la vía.
Esta supresión de peaje y su consecuente aumento de tráfico tiene lugar en vísperas de que arranque la subcomisión del Congreso que debatirá sobre el futuro modelo de sostenibilidad de la red de carreteras del país, en la que previsiblemente se sopesará la eventual articulación de un peaje en las autovías para contribuir a su mantenimiento.
La supresión del peaje de esta autopista deriva del compromiso que adquirió el ministro de Fomento, José Luis Ábalos, de no prorrogar los contratos de las vías de pago a su vencimiento.
Así, en caso de que se agote la Legislatura, en diciembre de 2019 también se levantará el peaje del tramo de la AP-7 entre Tarragona, Alicante y Valencia, y de la AP-4 Sevilla Cádiz.
En la AP-1, la supresión del pago por uso la ha llevado a cerrar 2018 con un aumento del tráfico del 5,26%, el doble que el registrado por el conjunto de vías de pago del país.
Al término del pasado año, la red de 2.550 kilómetros de autopistas elevó un 2,7% su intensidad media diaria de tráfico, hasta 19.670 vehículos, lo que, si bien supone encadenar el quinto año consecutivo de crecimiento, arroja desaceleración respecto al aumento del 4,6% de 2017.
CAÍDAS EN AUTOPISTAS RESCATADAS.
En el caso de las nueve autopistas rescatadas por el Estado, dos saldan el año con caídas de tráfico que el Gobierno espera revertir con la rebaja del 30% en los peajes, que además serán gratuitos por la noche, que comenzó a aplicar el 15 de enero.
En concreto, el tráfico de la radial R-3 Madrid-Arganda se desplomó un 24% en 2018, hasta 8.214 vehículos diarios, y el de la R-5 Madrid-Navalcarnero, descendió un 0,85% (10.868 usuarios).
El resto de estas autopistas se anotaron aumentos de tráfico que oscilan entre el 1,8% de la Circunvalación de Alicante y el del 15,7% de la Madrid-Toledo. Esta vía no obstante se mantiene como la que menos vehículos registra del país, con 1.193 al día.