MADRID, 28 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Banco de España avisa de que los datos de recaudación impositiva de abril muestran una "continuación de la tónica de debilidad" de los ingresos públicos al comienzo del segundo trimestre, y añade que para poder cumplir con el objetivo de déficit de este año será necesario "un aumento de los ingresos o la contención del gasto" en lo que resta de año.
En el 'Boletín Económico' correspondiente al mes de junio, el banco emisor recuerda que el déficit conjunto del Estado, las comunidades autónomas y la Seguridad Social hasta marzo alcanzó el 0,8% del PIB, cifra similar a la observada en el mismo periodo de 2015.
Sin embargo, el último programa de estabilidad prevé para este año una reducción de este saldo negativo desde el 5% del PIB al 3,6%, cifra esta última que la Comisión Europa ha elevado al 3,7%.
Los ingresos consolidados de estas tres administraciones apenas variaron en tasa interanual durante el tercer trimestre, debido fundamentalmente al comportamiento de la recaudación de los impuestos directos e indirectos. Esta tónica, señala el Banco de España, es la que se ha seguido observando en abril.
Por su parte, el gasto público avanzó un 0,5% hasta marzo, una tasa inferior a la del mismo periodo del año anterior (+1,2%). Si bien, la institución indica que este menor dinamismo se debe al efecto base de la devolución de la paga 'extra' de los funcionarios llevada a cabo en el primer trimestre de 2015.
En esta situación, el diagnóstico del Banco de España señala que el cumplimiento del objetivo de déficit público del 3,6% del PIB "requerirá, a la luz de los datos de ejecución presupuestaria disponibles, que el aumento de los ingresos y/o la contención del gasto en lo que resta de 2016 sean superiores a lo observado en los primeros meses del ejercicio".
"En concreto, la recaudación debería mejorar en los próximos trimestres para aproximarse a la previsión oficial de aumento de los ingresos en el conjunto de 2016 (+3,5%)", añade, para apostillar que el cumplimiento del objetivo agregado de gasto público, que prevé un avance del 0,1%, requerirá "una ejecución presupuestaria estricta" por parte de todas las administraciones".