BRUSELAS 13 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, ha negado hoy que exista un trato de favor para España por pertenecer a la zona euro con respecto a Hungría, país sancionado por déficit excesivo, y ha defendido que se trata de dos casos diferentes porque el plazo dado a Budapest para cumplir los objetivos de déficit expiró en 2011 mientras que Madrid tiene hasta 2013.
Barroso ha respondido así a críticas de eurodiputados por permitir relajar el objetivo de déficit para España desde el 4,4% al 5,3% este año y al mismo tiempo sancionar a Hungría congelándole 495 millones de euros de ayudas europeas por no tomar suficientes medidas de ajuste.
"La Comisión Europea hará todo por aplicar todos los tratados de manera absolutamente justa y sin ninguna discriminación. Y, francamente, el ejemplo mencionado de Hungría y España no se sostiene", ha zanjado Barroso en el pleno del Parlamento Europeo celebrado este martes en Estrasburgo (Francia).
El jefe del Ejecutivo comunitario ha querido negar así una doble vara de medir para los países de la Unión Europea en función de si están dentro o fuera de la moneda única y ha explicado que la "diferencia esencial" entre los dos casos es que "Hungría debía alcanzar su objetivo de reducción del déficit en 2011 (y) España debe hacerlo en 2013".
Bruselas propuso a Hungría y otros cuatro países --Chipre, Malta, Polonia y Bélgica_medidas para corregir su desviación del déficit perseguido y "todos aceptaron salvo Hungría", ha subrayado Barroso.
Con ello, el político portugués ha querido dejar claro ante los eurodiputados que "sería erróneo crear cribas artificiales" entre países de la zona euro y países que no tienen la moneda europea. "La Comisión Europea siempre ha apoyado la integridad de Europa y no vamos a tener dos posiciones dependiendo de nuestros países", ha concluido.