FRÁNCFORT (ALEMANIA), 25 (EUROPA PRESS)
El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, ha reconocido este jueves que la autoridad monetaria está estudiando modificar su objetivo de inflación a instancias de varios miembros del Consejo de Gobierno.
"Hay un sentimiento de reflexión en el Consejo de Gobierno en torno al objetivo, sobre si tenemos que mantenerlo o movernos a otro. Es un cambio importante, asi que vamos a mirarlo seriamente", ha especificado Draghi en la ruenda de prensa posterior a la reunión de política monetaria que el instituto emisor ha celebrado este jueves.
De esta forma, Draghi ha confirmado las informaciones publicadas en los últimos días por los medios 'Bloomberg' y 'Spiegel', que aseguraban que los banqueros centrales de la zona euro estaban comenzando a valorar la posibilidad de relajar su objetivo de inflación.
Actualmente, el objetivo del BCE es que la inflación se encuentre "cerca, pero por debajo del 2%". No obstante, este jueves el organismo no ha incluido esa frase en su comunicado posterior a la reunión y, por primera vez, ha introducido la noción de simetría en referencia a la inflación.
De esta forma, el BCE permitiría que la inflación se elevase por encima del objetivo siempre y cuando a medio plazo la media se sitúe en el objetivo.
La Reserva Federal de Estados Unidos, el homólogo del BCE en el país norteamericano, está revisndo durante 2019 sus estrategias, herramientas y prácticas de comunicación. Entre los muchos temas de discusión, la Fed está meditando si transicionar hacia un objetivo simétrico en torno al 2%.
NUEVO PAQUETE DE MEDIDAS
Como barajaban los analistas en los últimos días, el BCE ha dedicado la reunión de este jueves a preparar la artillería de estímulos, aunque ha decidido esperar a septiembre para comenzar a disparar.
Según ha explicado Draghi, dentro de dos meses dispondrán de actualización trimestral de sus prácticas macroeconómicas, por lo que el consenso en el cónclave de este jueves ha sido que era mejor esperar antes de entrar en acción.
El instituto emisor ha introducido un sesgo a la baja en su comunicación, al adelantar que los tipos de interés se mantedrán en su nivel actual, o menor, al menos hasta junio de 2020. También ha subrayado que está "listo para actuar" si las previsiones de inflación a medio plazo siguen situándose por debajo del objetivo y ha encomendado a ciertos comités del Eurosistema a examinar las opciones de nuevos estímulos, entre las que se encuentra la segmentación de la tasa de facilidad de depósito y el reinicio de las compras netas de activos.