BRUSELAS, 7 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea ha pedido a España que reduzca las cotizaciones sociales de los trabajadores para disminuir los costes salariales, y que compense la reducción de ingresos con aumentos del IVA y de los impuestos sobre la energía.
El Ejecutivo comunitario ha reclamado además al Gobierno aprobar la reforma de la negociación colectiva y modificar las cláusulas de revisión salarial "para garantizar que el crecimiento de los salarios refleje mejor la evolución de la productividad, así como las condiciones a nivel local y de la empresa".
Bruselas pide también a España que evalúe el impacto de la reforma laboral aprobada en diciembre de 2010 y que, si los resultados son negativos, haga más reformas en el mercado de trabajo para reducir la temporalidad y mejorar el acceso de los jóvenes.
En materia de consolidación fiscal, la Comisión recomienda a España que adopte más medidas de ajuste en 2011 y 2012 si las previsiones económicas del Gobierno no se cumplen para garantizar que se respeten los objetivos de déficit. Bruselas vaticina que la economía española crecerá este año sólo un 0,8% y un 1,5% en 2012, frente al 1,3% y el 2,3% que espera el Gobierno.
España debe también "garantizar que se cumplan los objetivos de déficit en todos los niveles de gobierno, aplicando estrictamente los mecanismos de control del déficit y de la deuda para las comunidades autónomas". El Ejecutivo comunitario reclama también que se adopte tanto a nivel nacional como en las comunidades autónomas una regla que limite el aumento del gasto por debajo del crecimiento del PIB.
Finalmente, la Comisión pide "reforzar la reestructuración en marcha del sector de las cajas de ahorro afrontando los puntos débiles que quedan en su estructura de Gobierno".
Estas recomendaciones de Bruselas de cara a la elaboración de las cuentas públicas del año que viene y a la actualización del programa nacional de reformas constituyen una de las medidas decididas por la UE los últimos meses para mejorar la coordinación económica entre los Gobiernos y prevenir futuras crisis. Las recomendaciones serán aprobadas en la cumbre de líderes europeos del 23 y 24 de junio.