MADRID, 31 (EUROPA PRESS)
Castellana Properties obtuvo un beneficio neto atribuible de 45,6 millones de euros en su último ejercicio fiscal, que abarca de abril de 2021 a marzo de 2022, frente a las pérdidas de 31,8 millones de euros que registró en el anterior ejercicio, gracias a la recuperación tras la pandemia, que ha impulsado las afluencias a sus centros comerciales.
El importe neto de la cifra de negocios de la socimi, procedentes principalmente del arrendamiento de sus activos inmobiliarios, ascendió a 72,6 millones de euros, un 31% más, recuperando así casi en su totalidad las cifras anteriores al Covid-19, según ha explicado en su cuenta de resultados, publicados en BME Growth.
En concreto, los ingresos brutos por alquileres alcanzaron los 58,8 millones de euros, con un crecimiento del 3,06% respecto al año anterior y del 3,8% sobre los niveles previos al estallido de la pandemia.
En este último ejercicio fiscal, Castellana Properties continuó bonificando a sus inquilinos para hacer frente a la fuerte caída en las ventas provocada por las restricciones a la movilidad, con 3,3 millones de euros, cifra inferior a los 18,8 millones en bonificaciones distribuidas el año anterior, cuando el impacto de la crisis sanitaria fue mucho mayor.
El resultado de explotación, por su parte, fue de 62,4 millones de euros, lo que también supone una clara mejoría respecto al resultado negativo de 19 millones registrado en el periodo comprendido entre abril de 2020 y marzo de 2021.
La mejora del valor de mercado de sus activos, al igual que ocurre con todas las socimis, también contribuyó positivamente al beneficio de la compañía. Así, la última valoración, a 31 de marzo de 2022, ascendía a 1.000 millones de euros, un 11,3% superior al precio de compra y un 4,5% en comparación con el año pasado.
De esta forma, esta revalorización sumo 22 millones a su balance, frente a los 45 millones que restó hace un año, cuando el valor de los activos inmobiliarios cayó fuertemente con motivo del coronavirus.
Asimismo, en el último año se han firmado 170 operaciones de alquiler que han supuesto una nueva renta firmada por valor de 9,5 millones de euros anuales. Además, la compañía registró una ratio de ocupación del 98,4%, mientras que la ratio de cobro a cierre de marzo se situó cerca del 99%.
Su consejo de administración ya ha comunicado la próxima distribución de dividendo, que tendrá lugar el próximo 23 de junio, cuando se repartirán 17 millones de euros a razón de 0,17 euros brutos por acción.