MADRID, 10 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Congreso de los Diputados ha aprobado una enmienda para acabar con la jubilación forzosa de los controladores aéreos a los 65 años, ampliando su régimen de reserva activa que tenían reconocido en caso de no contar con un puesto de trabajo hasta su retirada.
Este cambio legal ha sido incluido en la reforma de la Ley del sector ferroviario que tramita la Cámara Baja, que esta semana ha dado carpetazo a las fases de ponencia y Comisión, dejándola lista para su aprobación ante el Pleno. Sin embargo, esta votación no está prevista hasta septiembre.
Se trata de una propuesta del PSOE, que ha contado con el apoyo de Unidas Podemos y la abstención del PP en la reunión de la ponencia de este martes, según han informado a Europa Press fuentes parlamentarias.
SE PROLONGA MÁS ALLÁ DE LOS 65 AÑOS LA RESERVA ACTIVA
La enmienda viene a modificar la regulación de los controladores aéreos aprobada en 2010, que actualmente fija una jubilación forzosa a los 65 años. Hasta entonces, para aquellos operadores que dejen de poder desempeñar funciones de control de tránsito aéreo y para los que no haya un puesto de trabajo se prevé un régimen de reserva activa.
Este régimen mantiene al controlador dado de alta en la Seguridad Social con una retribución pactada en negociación colectiva, incompatible con cualquier trabajado por cuenta propia o ajena --a riesgo de rescisión del contrato por renuncia del trabajador--, con la excepción de labores de formación o de inspección aeronáutica en la Unión Europea.
MISMAS CONDICIONES, PERO CON TOPE SALARIAL
La propuesta supone añadir a partir de los 65 años, edad en la que estaba prevista la jubilación forzosa, un régimen de reserva activa especial, con la única diferenciación respecto al otro de límite salarial del importe anual correspondiente a 12 mensualidades de la base máxima de cotización mensual al Régimen General de la Seguridad Social.
Asimismo, se contempla un régimen transitorio para permitir el acceso a la situación de reserva activa especial a trabajadores que desde agosto de 2021 se hayan visto forzados a jubilarse a los 65 años y, por carecer de una carrera de cotización suficiente, no hayan podido generar una pensión de jubilación.
EN EL RESTO DE PAÍSES SE JUBILAN A LOS 60 AÑOS O ANTES
El PSOE justifica esta medida, aunque ha señalado que la jubilación forzosa de los controladores a los 65 años ya es la mayor edad de jubilación de este colectivo, situándose la de Eurocontrol, Suiza y Portugal en 57 años, en Francia a los 59 años, en Italia, Bélgica y Reino Unido a los 60 años y en Estados Unidos a los 56 años.
En todo caso, la principal fuerza del Gobierno de coalición asegura que esta prolongación de la vida activa se hace garantizando la seguridad en la prestación de servicio, y se garantiza la cotización a la Seguridad Social durante todo el período de reserva hasta alcanzar la edad de jubilación ordinaria.