MADRID 24 Jun. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, ha asegurado que la reforma laboral "no introduce elementos diferentes" en los Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) a los que existen en "estos momentos", tanto en su modalidad de suspensión o de extinción definitiva de los contratos, y defendió que acogerse a la modalidad de despido colectivo o individual por causas objetivas con 20 días de indemnización "no es tan sencillo" porque el juez sigue teniendo la última palabra.
En declaraciones a los periodistas antes de inaugurar la reunión de presidentes de Comisiones de Trabajo e Inmigración de los Parlamentos europeos en el Congreso de los Diputados, el ministro señaló que se están sacando "unas conclusiones que no tienen nada que ver con la realidad" sobre este aspecto de la reforma.
"No va a ser tan sencillo que la reforma permita hacer ajustes de plantilla e ir directamente al despido de 20 días, porque en última instancia es el juez el que tiene que autorizarlo", recalcó, si bien defendió que los empresarios están "en su legítimo derecho" de acudir a esta opción.
NO SE ACEPTARÁN "FRAUDES".
"Antes de la reforma ya se podía hacer una despido por causas objetivas", remarcó, antes de recordar que si el juez no considera justificada esta opción tendrán que pagar los 45 días de indemnización.
Preguntado por la situación de la empresa Saunier Duvall Clima, que habría decidido retirar su propuesta actual de ERE para tramitar un nuevo expediente a partir de las nuevas condiciones fijadas en la reforma laboral, Corbacho señaló que si el objetivo es "hacer un fraude", no vale la pena que esperen porque si no se acoge a la "legalidad objetiva" no se les aprobará en ningún caso.