PAMPLONA, 9 May. (EUROPA PRESS) -
Agentes de la Jefatura Superior de Policía detuvieron a cinco
personas como presuntas autoras de un delito de fraude en las
telecomunicaciones. Según una nota policial, un ex empleado de
telefonía instalaba líneas telefónicas siendo utilizadas como
locutorios clandestinos.
El pasado 3 de abril se presentó una denuncia por parte de un
representante de Telefónica, en la que se daba cuenta de consumos
anómalos observados en líneas de prueba o de uso interno de la
empresa en la central de la Rochapea.
El consultor-inspector de Telefónica denunció la fraudulenta
utilización de al menos veinte líneas de uso interno de la empresa
mercantil en las centrales del barrio de San Juan y de las
localidades de Berriozar, Ansoáin, Noáin y Barañáin.
Se realizaron llamadas a teléfonos de coste añadido e
internacionales, con un fraude de unos 18.000 euros. Varias de las
líneas se utilizaban alternativamente en periodos muy cortos.
La policía registró la participación en los hechos de Alfonso
Z.P., de 29 años, natural y vecino de Pamplona y ex trabajador de dos
empresas subcontradas por Telefónica España S.A.U. que ejerció su
labor de instalador de líneas básicas de la empresa en domicilios
particulares y empresas de Pamplona y su comarca.
Por ello, añade la nota, obtuvo los conocimientos técnicos
necesarios para dar de alta las líneas telefónicas, siendo el
organizador del fraude denunciado. Alfonso Z.P. dejó de trabajar en
estas empresas a finales de 2002, y se quedó llaves de las puertas de
acceso a distintas centrales telefónicas.
Además de Alfonso Z.P., se detuvo a Luis Enrique S.G., de 30 años,
natural de Ecuador y con domicilio en Barañáin, a Carlos T.C., de 24
años, a Yuliany T.C., de 18 años, y a Gustavo M.M., de 26 años, los
tres naturales de Colombia y vecinos de Ansoáin.
Según la Policía, Alfonso Z.P. acudía a locales nocturnos
frecuentados por personas extranjeras, "que por tal condición podrían
estar interesadas en la posibilidad de realizar comunicaciones
telefónicas con el menor coste posible". Una vez contactada la
persona interesada, le ofrecía la posibilidad de realizar sus
llamadas gratis a cambio de 100 euros mensuales.
Una vez conocida la vivienda en la que debía terminar la línea,
accedía a la correspondiente central telefónica manipulando una de
las líneas de uso interno de la empresa o para uso de pruebas. En el
edificio de la vivienda realizaba conexiones en el cajetín de la
comunidad y conectaba el terminal, disponiendo así de "tarifa plana
por 100 euros", sin costes por alta, alquiler o mantenimiento.
Todavía no se ha podido cuantificar el total del fraude, pero a
través de una de las líneas desviadas a una vivienda de la Rochapea,
en dos meses se realizaron llamadas con destino a Colombia con un
coste para Telefónica de 3.362 euros. En otra de Barañáin, en un mes,
se registró un cargo de 4.899 euros, con llamadas con destino
principalmente a Ecuador y móviles.
Según la Polícía, del gran número de llamadas realizadas al
extranjero, se desprende que los inquilinos de los domicilios a los
que fueron desviadas, hayan utilizado las mismas como locutorio
clandestino.
Los detenidos reconocieron haber efectuado llamadas al extranjero
de forma fraudulenta ya que conocían que la línea que utilizaban en
su domicilio era irregular. La investigación sigue abierta.
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09-May-2003 17:38:30
(EUROPA PRESS)
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