MADRID, 10 Feb. (EUROPA PRESS) -
Deutsche Telekom, Orange, Telefónica y Vodafone han recibido este viernes la autorización por parte de la Comisión Europea para avanzar en la creación de una empresa conjunta de publicidad.
Según han informado las distintas compañías en un comunicado, Bruselas ha dado su visto bueno de conformidad con el Reglamento de concentraciones de la Unión Europea. La plataforma, que estará participada de forma equitativa por las cuatro empresas (un 25% de cada una) se ha diseñado desde el principio con el objetivo de cumplir con la política europea de protección de datos, como el GDPR y la directiva sobre privacidad.
La nueva empresa tiene como objetivo implantar en Europa una plataforma tecnológica de marketing digital basada desde el primer momento en la privacidad, que busca beneficiar "por igual" a consumidores, anunciantes y editores. Su sede estará en Bélgica y será gestionada por directivos independientes bajo la supervisión de un consejo supervisor designado por los accionistas.
La empresa conjunta es el resultado de un proyecto lanzado por Vodafone y dirigido por los cuatro operadores para desarrollar una solución tecnológica para la publicidad digital en Europa.
PRIMER ENSAYO EN ALEMANIA
Los socios ya han iniciado un ensayo en Alemania y están estudiando la realización de pilotos adicionales en Francia y España para impulsar la plataforma, con la intención de ponerla a disposición de cualquier operador dentro de Europa.
El ensayo realizado por Vodafone el año pasado puso a prueba con éxito la plataforma en las redes de Vodafone y Deutsche Telekom en Alemania, junto con editores y anunciantes online. Esto permitió a los cuatro operadores evaluar "la facilidad de uso" de la plataforma a la hora de ofrecer a los consumidores "un mayor control y transparencia" sobre la forma en que las marcas se comunican con ellos.
Además, la iniciativa ha examinado cómo se utilizan los datos personales de los consumidores y cómo se protege su intimidad en el ecosistema de la publicidad online, defendiendo al mismo tiempo los principios de una Internet libre.
La plataforma en pruebas requiere del consentimiento del consumidor para activar las comunicaciones de las marcas a través de los editores. El único dato que se comparte es un token digital pseudoanónimo que no puede ser objeto de ingeniería inversa.
Según han explicado, la plataforma está diseñada específicamente para ofrecer a los consumidores "un cambio radical" en el control, la transparencia y la protección de sus datos, que actualmente recogen, distribuyen y almacenan a gran escala grandes operadores no europeos.
La empresa conjunta esbozará su visión y estrategia "a su debido tiempo", incluidos sus planes para adoptar comercialmente la tecnología que se está testando en la actualidad.