Advierte de "graves dificultades para mantenerse en funcionamiento" si no recibe ayuda de la SEPI
MADRID, 2 Feb. (EUROPA PRESS) -
Duro Felguera cerró los nueve primeros meses de 2020 con unas pérdidas netas de 125,1 millones de euros, en comparación con los 'números negros' de 3,6 millones de euros contabilizados en dicho período del años pasado.
Unos resultados que reflejan los efectos que la crisis de la pandemia de Covid-19 ha tenido sobre sus operaciones desde mediados
del mes de marzo de 2020 "y que han imposibilitado mantener los resultados positivos alcanzados en el ejercicio 2019", según ha informado este martes la firma asturiana a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Entre enero y septiembre, la compañía contabilizó un volumen de negocio de 111,471 millones de euros, lo que supone una subida del 64,9% en comparación con los ingresos de 317,73 millones de euros de los mismos meses de 2019.
La empresa registró un beneficio bruto negativo de 124,6 millones de euros, mientras que obtuvo un beneficio bruto de explotación (Ebitda) negativo de 111,9 millones de euros, frente a las ganancias de 11,3 millones de euros del año precedente.
Durante los nueve primeros meses de 2019, la contratación alcanzó 63,8 millones de euros, un 26,5% inferior que el ejercicio precedente, y la cartera al cierre del trimestre se situó en 328 millones de euros.
A cierre de septiembre del presente ejercicio, la posición de tesorería de Duro Felguera era de 51,3 millones de euros, al tiempo que la deuda bruta alcanzó los 192,1 millones de euros.
GRAVES DIFICULTADES PARA MANTENER EL FUNCIONAMIENTO
La ingeniería Duro Felguera ha solicitado, en el marco del expediente de apoyo público temporal del Fondo de Apoyo a la Solvencia para Empresas Estratégicas gestionado por SEPI, ayudas por valor de 120 millones de euros y se encuentra a la espera de respuesta.
Este apoyo público temporal se enmarca dentro de un proceso de reestructuración global de la compañía que contempla la refinanciación de la deuda sindicada actual de 85 millones de euros y la obtención de una línea revolving de avales por importe de 100 millones de euros para cubrir las garantías de los siguientes dos años, ambas actualmente en negociación con las entidades financieras.
Paralelamente, ha abierto un proceso de captación de inversores privados y actualmente se encuentra en proceso de evaluación de las ofertas no vinculantes de potenciales inversores que ha recibido.
"En ausencia del apoyo público temporal descrito anteriormente, el grupo podría llegar a tener graves dificultades para mantenerse en funcionamiento", ha alertado.