MADRID, 12 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los bonistas de Codere han advertido al consejo de administración y a los accionistas mayoritarios de la compañía de que si no aceptan su oferta, "única alternativa viable" al concurso o liquidación, serán considerados "los responsables legales" de la insolvencia de la sociedad, según la nueva Ley Concursal aprobada por el Gobierno el pasado viernes.
En una carta remitida al consejo de administración de Codere a la que ha tenido acceso Europa Press, los bonistas, que poseen la mayor parte de dos emisiones de 760 millones de euros y 300 millones de dólares del grupo, recuerdan que "resulta evidente" que la nueva Ley Concursal es "muy relevante" para la situación de la compañía y debería modificar "sustancialmente" la actitud de su órgano rector frente a su oferta.
La familia Martínez Sampedro, accionista mayoritario de Codere con una participación del 63,7% del capital, se ha negado hasta ahora al canje de deuda por capital. Sin embargo, en el cambio normativo, el Gobierno ha declarado en la exposición de motivos de la nueva Ley Concursal que la reestructuración de la deuda de sociedades con problemas financieros "es muy preferible frente a que dichas sociedades sean declaradas en concurso", afirman los bonistas.
Así, subrayan que el Ejecutivo ha reconocido en su normativa el papel "fundamental" que juega, antes de la declaración de concurso, la capitalización de deuda, como la propuesta en su oferta, "en el 'desapalancamiento' de sociedades en dificultades financieras, permitiendo proteger los empleos y mantener el valor del negocio".
Además, destacan que la nueva Ley Concursal incluye como principal mecanismo para fomentar la capitalización de deuda el riesgo de que "los accionistas (y los miembros del Consejo) que se opongan sin causa razonable a dicha capitalización propuesta por los acreedores incurran en responsabilidad personal".
RESPONSABLES DE 'CONCURSO CULPABLE'.
De esta manera, los bonistas señalan que, en caso de rechazar sin causa razonable la propuesta de capitalización de deuda, estos accionistas podrían ser considerados "responsables de provocar un 'concurso culpable' de la sociedad".
Los acreedores, que aún así insisten que siguen reservándose "todos los derechos" respecto a los bonos, también consideran que la implementación de su oferta no solo preservaría el negocio del grupo y los puestos de trabajo de sus empleados, "sino que tendría como resultado una mayor recuperación de valor para los accionistas que, en caso de concurso y/o liquidación, no recuperarían nada".
El pasado 6 de febrero, Codere agotó el plazo que tenía para la extensión de su crédito senior sin haber podido alcanzar un acuerdo con al menos la mitad de sus bonistas, condición que era necesaria para la ejecución de la prórroga.
En su oferta a la compañía, los bonistas ofrecían una inyección de capital a cambio de pasar a poseer una participación mayoritaria en el capital del grupo de juego privado.