La compañía presenta al Gobierno un conjunto de ideas para situar a España a "la cabeza del tren" de Europa en 2030
MADRID, 14 Dic. (EUROPA PRESS) -
El consejero delegado de Ericsson España, José Antonio López, ha felicitado al Gobierno por el "fantástico" plan puesto en marcha para impulsar la digitalización de España, pero ha incidido en que son necesarios al menos otros 2.000 millones de euros en ayudas públicas para que el país se sitúa a la cabeza de Europa.
En un encuentro 'online' con la prensa, López ha querido agradecer al Gobierno y a todo el equipo del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital la negociación de los fondos europeos y la puesta en marcha de la estrategia España Digital 2025, así como los planes presentados recientemente de conectividad, 5G e Inteligencia Artificial (IA).
"Nunca en 20 años habíamos visto un plan tan ambicioso, tan detallado y tan bien estructurado", ha incidido el consejero delegado de Ericsson España, quien ha pedido que ahora este plan "se haga realidad" y el proceso para repartir los fondos sea "clara, sencillo y rápido" para que lleguen a las empresas cuanto antes.
Sin embargo, López también ha advertido de la "realidad" de España, que tiene un PIB per capital un 30% inferior a la media europea; una tasa de paro superior al 16%, que previsiblemente aumentará cuando acaben los ERTEs; un desempleo juvenil por encima del 40% y una población de las más envejecidas de Europa.
En este contexto, ha apuntado que no hay duda de que España se va a digitalizar con el plan presentado por el Gobierno y va recuperar la posición que tenía antes de la pandemia, pero ha incidido en que si quiere pasar a "la cabeza del tren" en Europa no se pueden hacer las cosas de la misma forma que hasta ahora.
PROPUESTA DE ERICSSON
En este sentido, Ericsson ha remitido al Gobierno un plan de objetivos concretos que se deben alcanzar en el año 2030 como corregir el déficit de PIB per capita con Europa y que alcance de media los 37.000 euros por habitante, una tasa de paro por debajo del 7%, una deuda pública inferior al 60% del PIB, un peso del sector industrial en el PIB superior al 22%, un 30% de pymes con actividad exportadora, diez empresas españolas en el Eurostoxx 50 y 15 nuevos unicornios.
Asimismo, el plan de la compañía también fija otros objetivos en sostenibilidad, como que el 90% de la energía generada sea renovable, que el 60% lo fuera y que España alcances emisiones cero en 2030. A estos se suman objetivo educativos como que el 15% de licencias en 2030 sean de carreras que hoy no existen, que el 45% de licenciados en secundaria sean de FP, que el 60% de licenciados en STEM sean mujeres y que no haya brecha salarial de género.
Para lograr alcanzar estos objetivos, Ericsson propone una serie de ideas como que el 100% del territorio nacional esta cubierto con cobertura de 100 Mbps, que en el caso de las poblaciones de más de 5.000 habitantes debería ser de 1 Gbps y en el de hospitales, centros de salud, parques empresariales o centros de I+D la velocidad llegue a 10 Gbps.
Asimismo, propone crear centros de soporte para ayudar que los que más lo necesiten, como la tercera edad, tenga ayuda para usar la tecnología y hacer que todo los servicios públicos y pymes sean digitales. En educación apuesta por que un acuerdo para incluir asignaturas digitales en carreras universitarias y FP y aprendizaje de programación en primaria.
"Con un poco más de esfuerzo del que se ha hecho en el plan, que es fantástico, con un poco mas de peso en digitalización complementado con el esfuerzo de la empresa privada seríamos capaces de llegar a esas métricas 2030", ha asegurado.
MÁS AYUDAS PÚBLICAS
En este sentido, ha añadido que, aunque nunca ha habido "tanto dinero público" para el desarrollo de tecnologías digitales, y en particular móviles, para lograr alcanzar los objetivos que propone harían falta unos 2.000 millones públicos más, que se verían complementados una inversión por el doble de valor por parte de la empresa privado dado el efecto tractor de las ayudas.
López ha remarcado que las arcas de los operadores están "muy achuchada" por el impacto de la pandemia en los ingresos de roaming y del negocio de empresas y no se les puede pedir mucho esfuerzo, por lo que ha pedido "un poco más de apoyo" al Gobierno dado que las cuentas de las empresas privadas están "muy justitas" y no da para las inversiones que se hicieron en 3G y 4G.
A este respecto, ha confiado en que la subasta de 700 MHz que se celebrará a principios de 2021 no tenga fines recaudatorios, como han defendido del Gobierno, aunque les preocupa que los Presupuestos Generales del Estado prevean una recaudación de 2.100 millones de euros con las subasta. Además, si se confirma que se reducirán las tasas a los operadores que más despliegues, podría ser bueno para el ecosistema.