ESTOCOLMO, 10 Ene. (EUROPA PRESS) -
El grupo sueco de telecomunicaciones Ericsson ha asumido un impacto de 6.100 millones de coronas suecas (596 millones de euros) en sus cuentas del cuarto trimestre de 2018 en relación con las provisiones realizadas para llevar a cabo la transformación de su división BSS, especializada en la prestación de servicios a operadores, según ha informado la empresa.
De la cifra de 6.100 millones de coronas suecas, unos 3.100 millones de coronas (303 millones de euros) corresponderán a costes de reestructuración, precisó la compañía, que espera asumir un impacto negativo de otros 1.500 millones de coronas (146 millones de euros) en 2019 por las medidas de ajuste planteadas, incluyendo la prevista reducción de plantilla.
"La empresa ha tomado la decisión de adoptar medidas adicionales para acelerar la reestructuración del negocio de BSS, incluyendo su cartera de productos y contratos", indicó la compañía, señalando que las provisiones relacionadas con la ejecución de las medidas previstas, junto a las adoptadas en previsión de pérdidas de contratos, tendrán efectos negativos en el beneficio de explotación de Ericsson en el último trimestre de 2018.
En este sentido, Ericsson defendió que las medidas previstas contribuirán a reducir de manera material las pérdidas de BSS desde 2019 y expresó su confianza en que la renovada estrategia colocará al área de servicios digitales en una fuerte posición de cara a alcanzar sus metas de márgenes operativos, que apuntan a algo menos del 5% en 2020 y entre un 10% y un 12% en 2022.
La compañía sueca indicó que proporcionará más detalles al respecto en la presentación de sus cuentas del cuarto trimestre y del conjunto del ejercicio 2018, que tendrá lugar el próximo 25 de enero.