BRUSELAS 17 Feb. (EUROPA PRESS) -
La secretaria de Estado de Empleo, Engracia Hidalgo, ha reconocido este viernes que la reforma laboral aprobada por el Gobierno del PP "por sí misma no genera empleo" pero sí busca dar la flexibilidad a las empresas para garantizar que "el despido sea la última opción" y ha confiado en que contribuya a sentar las bases para crear empleo "estable y de calidad" cuando el "crecimiento económico sea una realidad" en el país.
Hidalgo ha confirmado en declaraciones a la prensa a su llegada al Consejo de ministros de Empleo de la UE que presentará a sus socios "las líneas maestras" de la reforma laboral cuyo objetivo es "contribuir a frenar lo antes posible la sangría de desempleo que se está dando en España y a la vez poner las bases para conseguir cuando haya crecimiento económico lo antes posible un empleo estable y de calidad". "La hemos hecho pensando en los 5,2 millones de parados", ha subrayado.
La secretaria de Empleo defenderá ante sus socios que se trata de una reforma laboral "equilibrada" para atajar sobre todo el paro entre los jóvenes por tratarse del colectivo que registra "una mayor tasa de paro en España" y apuesta por "los parados de larga duración y también por las PYMES y los autónomos" dado que las empresas de menos de 50 trabajadores constituyen "más del 95%" del tejido productivo español.
Hidalgo ha avanzado que el Gobierno trabajará junto al equipo de acción que enviará la Comisión Europea a España la próxima semana para analizar cómo se pueden aprovechar los fondos estructurales europeos asignados pero no utilizados todavía para atajar el paro entre los jóvenes, que en España se eleva a cerca del 50%, la tasa más alta de toda la UE.
Desde el Gobierno, ha explicado, estarán "abiertos" a poner en marcha cualquier proyecto que se consideren "novedosos" y permitan "que se frente cuanto antes la sangría del paro entre los jóvenes" en un contexto de "decrecimiento económico".
DERECHO A FORMACIÓN PERMANENTE.
Asimismo, ha destacado que la reforma "desarrolla el trabajo a tiempo parcial, el teletrabajo" y otorga "más derechos a los trabajadores porque la formación se considera un derecho individual" y "apuesta por la formación permanente de los trabajadores" por ejemplo en nuevas tecnologías de la información.
Respecto a la flexibilidad que introduce la reforma, Hidalgo ha defendido que se trata de garantizar que "los trabajadores y las empresas tengan mecanismos para superar conjuntamente la crisis sin tener que acudir a la vía del despido" y garantizar así que "el despido siempre sea la última opción".
"Son las bases para que empresarios y trabajadores vayan en el mismo barco y hacer que en esta situación tan dura el despido sea la última opción y que la gente pueda mantener su puesto de trabajo", ha insistido la secretaria de Estado. "Esta reforma laboral pone las bases para que ese empleo estable y de calidad sea una realidad", ha agregado.
BONIFICACIONES, DINERO BIEN INVERTIDO
Preguntada por el coste de la reforma de al menos 230 millones de euros en el primer año, Hidalgo ha recordado que "mucho" de este coste estimado está ligado a las bonificaciones fiscales para empresas de menos de 50 trabajadores que contraten a menores de 30 años
"Ojalá superemos las expectativa porque querrá decir que se ha contratado mucho", ha explicado, recordando que este tipo de bonificaciones es "dinero bien invertido" porque todo trabajador "paga sus impuestos" y "está consumiendo".
Hidalgo ha defendido que el Gobierno de Mariano Rajoy ha impulsado las reformas que España "necesitaba" como la Ley de Estabilidad, la reforma financiera y la laboral, así como el primer paquete de recortes presupuestarios "necesario" para cumplir "los objetivos de déficit" pactados con la UE.