MADRID 17 Dic. (EUROPA PRESS) -
El crecimiento del PIB en España para el año 2025 se situará en el 1,9%, gracias la resistencia del consumo, debido a los buenos datos de empleo, mientras que en la zona euro el aumento será del 0,9% con países como Alemania y Francia en situaciones de mayor inestabilidad, según el último informe en tendencias macroeconómicas 'Economic Outlook 2025' realizado por Mastercard.
"La economía mundial tras los shocks provocados por los conflictos armados, la crisis energética, la inflación y la pandemia ha conseguido normalizarse y, en concreto, la economía española ha controlado estos shocks especialmente bien, a pesar de que la crisis de la pandemia impactó de manera más profunda", ha señalado la 'chief economist' en Europa del Instituto Económico de Mastercard, Natalia Lechmanova.
En estos últimos años, la economía española ha crecido de manera "considerable" y, aunque para 2025 se espera un desaceleración, en línea con las demás economías europeas, todavía resiste gracias "no solo al turismo", sino también al aumento del consumo en servicios, "experiencias", que tras la pandemia son más apreciadas por los consumidores, según ha indicado Lechmanova.
Este mantenimiento del consumo viene derivado de un "buen comportamiento" de la tasa de desempleo y un aumento de la renta real disponible, a pesar de que la tasa de ahorro durante este último periodo ha aumentado por la incertidumbre, situándose más cercana al 14% que al 7% en el que se encontraba en los años anteriores a la pandemia.
Gracias a la normalización de la situación económica, desde Mastercard apuntan a una disminución de esta tasa de ahorro, que no recuperará todavía los niveles anteriores a la crisis del Covid-19, pero que se situará más cerca del 10% y ayudará a empujar el consumo hacia arriba.
MAYOR IMPACTO DE LA INMIGRACIÓN Y LA MUJER EN EL MERCADO LABORAL
En España y en la mayoría de países de ingresos altos la inmigración ha supuesto un empuje para la población activa, así como se ha observado una reincorporación de las mujeres al mercado laboral por encima de los hombres, según el informe de Mastercard.
En concreto, la inmigración está empujando el empleo y el mercado español está siendo capaz de absorber a estos nuevos trabajadores, lo que ha generado un impacto positivo en los flujos de capital.
En el caso de las mujeres, el informe analiza los datos de diferentes países acerca del impacto que ha tenido en los países la incorporación al mercado laboral divido por género y, en este sentido, en España la tasa de actividad ha crecido desde 2019 un 1,43% en las mujeres frente a la disminución del 0,25% por parte de los hombres.
Los motivos detrás de estas cifras son un aumento de la flexibilidad laboral y un crecimiento del empleo en sectores con mayor participación de las mujeres como la educación y la sanidad, según afirma Mastercard.
LOS ARANCELES DE TRUMP DEBEN PREOCUPAR A TODO EUROPA
La llegada de Donald Trump a la Casa Blanca acarrea la amenaza de la imposición de aranceles a los productos europeos que perjudicarán a la economía de la eurozona.
A pesar de que las exportaciones españolas a EEUU solamente suponen un 5% del total, el resto de economías como la francesa o la alemana tienen una mayor dependencia del país americano, entre el 10% y 15%, lo que provoca una mayor disponibilidad de productos en estos países que son los destinos preferidos de los bienes españoles, algo que se extiende a todo Europa donde las exportaciones comunitarias tienen un gran peso.
EL TURISMO ESPAÑOL AUMENTA SU VALOR AGREGADO
Francia ha superado a España en número de turistas llegados a su territorio, sin embargo, en ingreso medio es España la que supera a Francia, lo que para Lechmanova es una muestra del recorrido que el turismo español está realizando hacia un turismo de mayor valor agregado, calidad y sostenibilidad.
Asimismo, el informe analiza que los turistas ya no vendrán solo en julio y agosto, sino durante todo el año, y que ciudades como Sevilla o Valencia están superando en el crecimiento de transacciones hoteleras internacionales a ciudades como Madrid o Barcelona, destinos históricamente más típicos.