BRUSELAS 24 Ene. (EUROPA PRESS) -
Los ministros de Economía de la eurozona han pedido hoy a los acreedores privados de Grecia, representados por el Instituto de Finanzas Internacionales, que acepten un tipo de interés inferior al 4 por ciento en los nuevos bonos helenos que recibirán como parte de la reestructuración de la deuda griega.
El Eurogrupo ha solicitado al Gobierno de Atenas que siga negociando con la banca con el objetivo de concretar "en los próximos días" el acuerdo sobre la quita del 50 por ciento sobre la deuda griega, que se hará a través de un canje de bonos. El objetivo es que la deuda se rebaje hasta el 120 por ciento del PIB en 2020, tal y como acordaron los líderes europeos en octubre para garantizar su sostenibilidad.
Las negociaciones están estancadas porque la banca reclama que los nuevo bonos tengan un interés de al menos el 4 por ciento.
"Los ministros han pedido al colega griego que continúe las negociaciones con el sector privado para que tipos de interés de los nuevos bonos estén claramente por debajo del 4 por ciento, lo que significa que el interés tendrá que estar muy por debajo del 3,5 por ciento para el periodo anterior a 2020", ha dicho el presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker, al término de la reunión.
Juncker ha admitido que "es obvio que el programa de Grecia no va en la buena dirección y deben tomarse medidas previas antes de que podamos considerar la conclusión de un nuevo programa para Grecia". Los líderes europeos se han comprometido a un segundo rescate por valor de 130.000 millones de euros.
El comisario de Asuntos Económicos, Olli Rehn, ha explicado que los inspectores de la UE y el Fondo Monetario Internacional se encuentran ya en Bruselas para negociar estas actuaciones previas, entre ellas reformas estructurales.
Los ministros de Economía de la eurozona han finalizado el Tratado para crear el fondo de rescate permanente de la UE, tras superar las reticencias de Bruselas, que ahora debe ser ratificado para entrar en vigor en julio de este año. También han examinado el funcionamiento del fondo actual tras la decisión de la agencia de 'rating' S&P de retirarle su máxima nota 'triple A'.
El director del fondo, el alemán Klaus Reglin, ha asegurado que inversores de países terceros se han comprometido a invertir 60.000 millones de euros para aumentar su potencia de fuego. Por su parte, Rehn ha defendido de nuevo reforzar los cortafuegos financieros de la UE combinando la potencia del fondo temporal, el permanente y el aumento de los recursos del Fondo Monetario Internacional.
Finalmente, los 27 han examinado el último borrador del Tratado para reforzar la disciplina fiscal, en el que no participa Reino Unido, y lo han considerado una buena base para alcanzar un acuerdo final en la cumbre de líderes europeos del 30 de enero. Juncker ha explicado que antes de esa fecha se publicará la versión final del texto para que los jefes de Estado y de Gobierno la ratifiquen.