TOKIO, 9 Oct. (EUROPA PRESS) -
Las distintas reformas encaminadas a incrementar la seguridad y transparencia del sector financiero han logrado hasta la fecha escasos resultados a la hora de reducir la complejidad de las instituciones y de dar respuesta al problema de aquellas entidades demasiado grandes para quebrar, según admite el Fondo Monetario Internacional (FMI) en la edición de otoño de su 'Informe Global de Estabilidad Financiera'.
"La crisis ha dado lugar a una multitud de reformas regulatorias que buscan afianzar la seguridad del sistema financiero (...) a pesar de lograr algunos avances durante los cinco últimos años, los sistemas financieros aún son demasiado complejos, mantienen estrechas vinculaciones interbancarias a nivel interno, están demasiado concentrados y no se ha resuelto la cuestión de las instituciones que son demasiado importantes para quebrar", señala la institución.
En este sentido, el FMI constata que los progresos en al ámbito regulatorio han sido limitados, en parte porque numerosas reformas aún se encuentran en las primeras etapas de su implementación, y en parte porque varias economías aún están aplicando medidas de intervención para hacer frente a la crisis, "lo que ha retrasado la puesta a cero del sistema financiero para poder imprimirle una trayectoria más segura".
Así, el Fondo advierte de la necesidad de mantener el compromiso con la agenda de reformas con el fin de reforzar la capacidad de resistencia de las entidades, a pesar de que la puesta en práctica de estas reformas en el actual entorno representa considerables desafíos.
"Sin entidades con mayor capacidad de resistencia, la recuperación continuará demorándose", advierte la institución dirigida por Christina Lagarde, que anima a no ceder en el "ímpetu" para aplicar esta agenda de reformas.
Entre los ámbitos que el FMI considera que aún requieren atención se encuentra el establecimiento de un diálogo mundial sobre las ventajas y las desventajas de las restricciones directas a las operaciones bancarias para abordar la cuestión de las instituciones que son demasiado importantes para quebrar, así como prestar una mayor atención a los segmentos del sistema no bancario que pueden estar generando riesgos sistémicos.
Asimismo, el FMI señala en su informe la necesidad de conseguir un mayor avance de los planes de recuperación y resolución de instituciones grandes, sobre todo de aquellas que operan a escala internacional.