BRUSELAS, 23 Oct. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Finanzas de Francia, Bruno Le Maire, ha urgido este martes al resto de países de la Unión Europea a aprobar antes de que finalice el año un impuesto europeo que grave los ingresos de las multinacionales que operan en el entorno digital.
"Es tiempo de decidir frente a la injusticia fiscal que hace que nuestras empresas en Europa; en París, Roma, Berlín, Londres o Madrid; paguen 14 puntos más de impuestos que las empresas digitales", ha expresado en una comparecencia ante la comisión de Asuntos Económicos y la comisión especial sobre Delitos Financieros y Evasión y Elusión Fiscales del Parlamento Europeo.
Le Maire ha criticado que el tipo medio del impuesto de sociedades para las firmas europeas sea del 23%, mientras que en el caso de los gigantes digitales se reduce al 9%. "Que cuantos más beneficios tengas, menos impuestos pagas no puede ser la regla europea, no puede ser nuestra concepción de justicia fiscal", ha subrayado.
Por ello, ha instado al resto de Estados miembros a impulsar las negociaciones para que sea posible lograr un acuerdo sobre este gravamen a nivel europeo antes de que finalice el año. Este resultado, sin embargo, se antoja complicado dada la oposición de países como Irlanda, Suecia o Dinamarca sobre un asunto que requiere el visto bueno de todos las capitales.
Así el ministro francés ha pedido acelerar las conversaciones para acordar un impuesto similar al que el Gobierno aprobó en el Consejo de Ministros del pasado viernes. Este gravamen nacional, de hecho, se basa en la propuesta presentada por la Comisión Europea en mayo para un impuesto a nivel comunitario.
Bruselas en concreto ha planteado un gravamen del 3% sobre los ingresos los ingresos generados por la venta 'online' de espacios publicitarios, las actividades de intermediación que permiten a los usuarios interactuar entre ellos para facilitar la venta de bienes y servicios y la venta de datos aportados por los propios usuarios.
Le Maire ha asegurado ser consciente de las reservas y las "críticas" planteadas por algunas capitales, pero ha recordado que se decía que era "imposible" sacar adelante esta iniciativa que ahora cuenta, según sus palabras, con el apoyo de 19 Estados miembros, entre los que ha citado a España, Italia o Reino Unido.
Otros, como Luxemburgo, los bálticos y Países Bajos, también habrían dado su respaldo siempre y cuando el impuesto europeo sea sustituido por el que se acuerde en un futuro en el seno de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), que será una solución "más sólida y general".
En cualquier caso, el ministro francés ha defendido que los trabajos en este organismo internacional se acelerarán si la Unión Europea consigue logar un acuerdo a nivel doméstico. "Tendremos más rápido una solución en la OCDE cuando la tengamos nosotros. El día que haya un impuesto europeo para los gigantes digitales, verán acelerarse los trabajos en la OCDE", ha opinado.
En consecuencia, ha "invitado" a todos aquellos países europeos que desean un acuerdo a nivel internacional para gravar a las multinacionales digitales a apoyar este impuesto en el bloque comunitario.