MADRID 9 Ene. (EUROPA PRESS) -
Las transferencias bancarias cambian a partir de este jueves, tras la entrada en vigor de un nuevo Reglamento de la UE que obliga a igualar el precio de todas las transferencias bancarias, las inmediatas y ordinarias.
El nuevo reglamento, aprobado en el Parlamento Europeo en febrero, busca evitar esperas a los clientes minoristas y las empresas y mejorar la seguridad de las transferencias. Los bancos y otros proveedores de servicios de pago (PSP, en inglés) tendrán que garantizar transferencias asequibles y procesadas al momento.
El texto, que actualiza las normas de la Zona Única de Pagos en Euros (SEPA, por sus siglas en inglés), establece que la inmediatez de las transferencias deberá garantizarse con independencia del día o la hora y el dinero deberá llegar a la cuenta del destinatario en un plazo de diez segundos. El ordenante también debe ser informado en el mismo plazo de si los fondos transferidos se han puesto a disposición del receptor.
Además, los cargos aplicados por las transferencias inmediatas en euros no podrán ser superiores a los aplicados a las operaciones convencionales de transferencias que no sean de carácter instantáneos en euros.
SEGURIDAD
Para garantizar la seguridad, los proveedores de servicios de pago deben aplicar medidas sólidas y actualizadas de detección y prevención del fraude, a fin de evitar que el dinero transferido acabe por error o fraude en la cuenta equivocada y tendrán que ofrecer, sin coste adicional, un servicio de verificación de la identidad del destinatario.
Como salvaguardia adicional contra el fraude, las entidades también deben permitir a sus clientes fijar un importe máximo para las transferencias instantáneas en euros, que podrá modificarse fácilmente antes de ejecutar una nueva transferencia.
De acuerdo a las nuevas reglas, si una entidad no cumple con sus obligaciones de prevención del fraude y esto provoca un perjuicio financiero, el cliente podrá solicitar una compensación.
Los proveedores de servicios de pago que ofrezcan transferencias instantáneas también deben verificar si alguno de sus clientes está sujeto a sanciones u otras medidas restrictivas relacionadas con el blanqueo de capitales y la financiación del terrorismo.
COSTE
Según ha afirmado este jueves Asufin a través de un comunicado, el precio medio oficial fijado por la banca para cumplir con la obligación de igualar el precio de transferencias ordinarias e inmediatas sería de 2,95 euros.
Este precio supondría un encarecimiento de hasta un 134% del coste de las transferencias ordinarias de los dos últimos años, de acuerdo al cálculo de la asociación, y un ahorro respecto al coste medio de las transferencias inmediatas, de unos 3,65 euros en 2023, y 3,69 euros en 2024.
Según la asociación, la mayoría de los clientes seguirán sin pagar estas comisiones por los acuerdos de vinculación que favorecen las entidades --por domiciliación de nóminas, recibos, contratación de productos, etc.-- y por el contexto "claramente marcado" por la política de gratuidad del proveedor de servicios bancarios Bizum.
Asufin alerta, sin embargo, de que las transferencias por Bizum, a diferencia de la estándar, es irreversible en el momento en que se emite, por lo que no recomienda usar esta opción si no se conoce al destinatario.
Por su parte, la Asociación de Usuarios de Bancos, Cajas y Seguros (Adicae) ha celebrado las mejoras en cuanto a seguridad y lucha contra el fraude que implica la entrada en vigor este jueves de un reglamento europeo sobre transferencias bancarias.