NUEVA YORK, 23 Nov. (EUROPA PRESS) -
El banco estadounidense Goldman Sachs, considerado como una de las entidades más influyentes de Wall Street, ha publicado bajo el epígrafe 'Mantengamos la fe' las diez cuestiones claves para la economía mundial en el próximo año 2015, incluyendo un nuevo orden para los precios del petróleo, la lucha contra la 'bajaflación' mediante programas de flexibilización cuantitativa (QE) o las diferencias entre las economías avanzadas en un contexto de recuperación más amplia que en 2014.
UNA RECUPERACIÓN MÁS AMPLIA.
Goldman Sachs confía en que la economía de EEUU registrará en 2015 "más de lo mismo" con un fuerte ritmo de crecimiento que actuará como el ancla fundamental para la recuperación global, mientras espera que Japón y la zona euro experimenten el próximo año un mayor crecimiento aupados por la relajación de las condiciones financieras, los bajos precios del crudo y cierta flexibilización en la concesión de préstamos, lo que dibujará un cuadro "algo mejor" para las economías avanzadas.
No obstante, el banco estadounidense se cuestiona cuánta de esta mejoría está ya descontada y señala que los principales riesgos para esta mayor recuperación proceden de la zona euro y China
DIVERGENCIAS ENTRE ECONOMÍAS AVANZADAS.
En este sentido, Goldman Sachs no prevé que ni la zona euro ni Japón sean capaces de reducir la brecha que les separa respecto al ritmo de crecimiento pronosticado para en EEUU y además, apunta el potencial impacto que en varias economías europeas puede conllevar la incertidumbre política ligada a los procesos electorales previstos en España, Portugal y Reino Unido.
La entidad apunta también que, mientras en EEUU la Reserva Federal (Fed) avanza hacia la normalización de su política monetaria, los bancos centrales de la eurozona y Japón profundizan en la relajación y la expansión de su balance.
UN NUEVO ORDEN PETROLERO.
En cuanto a la evolución de los precios del crudo, Goldman Sachs advierte de que el margen para sorpresas a la baja aún no se ha terminado y subraya que, si bien los precios bajos del petróleo refuerzan el impulso deflacionario de las materias primas, al mismo tiempo contribuyen al aumento de los ingresos disponibles, lo que puede tener efectos positivos para el crecimiento, aunque implica presiones sobre aquellos países para los que la exportación de crudo supone una fuente clave de ingresos.
LA 'BAJAFLACIÓN' PODRÍA FORZAR EL QE DEL BCE.
Por otro lado, Goldman Sachs considera que la 'bajaflación' ('lowflation') y las fuerzas desinflacionarias continuarán jugando un papel importante en los mercados en 2015, particularmente en la zona euro, aunque también en EEUU, donde el crecimiento es más fuerte.
En respuesta a este tipo de riesgos, la entidad cree que, en caso de emerger, el BCE podría desencadenar un programa de QE más agresivo incluso de lo esperado por el mercado si detecta un empeoramiento de las condiciones económicas.
MERCADO ALCISTA PARA EL DÓLAR.
El banco estadounidense apuesta porque la moneda de EEUU continuará fortaleciéndose frente al euro y el yen en 2015. En este sentido, Goldman Sachs augura un cambio de 1,15 dólares por euro este año, que acercaría la paridad entre ambas monedas para 2017.
LA RESERVA FEDERAL NO SUBIRÁ TIPOS ANTES DE SEPTIEMBRE.
Por otra parte, las previsiones de Goldman Sachs apuestan por que la Reserva Federal de EEUU (Fed) no subirá los tipos de interés al menos hasta el próximo mes de septiembre, aunque advierte de que una vez iniciadas las subidas, el ritmo de incremento de los tipos será más rápido.
UNA DESACELERACIÓN CON BACHES EN CHINA.
Respecto a la economía de China, el banco estadounidense mantiene su expectativa de un crecimiendo de entre el 6% y el 7% para los dos próximos años, aunque advierte de una previsible mayor volatilidad macroeconómica.
MÁS POLARIZACIÓN EN LOS EMERGENTES.
En cuanto a la evolución de las economías emergentes, los analistas de Goldman Sachs prevén una mejoría de los desequilibrios en su gran mayoría, gracias en parte a la desinflación procedente de los precios internacionales de los alimentos y el petróleo.
Sin embargo, el próximo año se acrecentará la polarización entre aquellos países emergentes que han afrontado sus desequilibrios macroeconómicos y los que no. Así, la entidad advierte del riesgo de crédito en 2015 vinculado a países como Venezuela, Rusia o Argentina si los precios de las materias primas siguen bajando.
LOS RETOS DE UN MUNDO CON BAJA VOLATILIDAD.
En opinión de Goldman Sachs durante 2015 se prolongará la "Gran remoderación", que salvo episódicos repuntes motivados por bajos niveles de liquidez, permitirá mantener el próximo año una baja volatilidad en los mercados.
VIVIR EN UN MUNDO DE RENTABILIDAD BAJA.
Por otro lado, Goldman Sachs contempla un año 2015 en el que la mayor parte de los activos ofrecerá una rentabilidad escasa en términos absolutos, aunque apunta que la renta variable, particularmente la de países emergentes, continuará ofreciendo un mayor retorno, mientras recuerda que las divisas serán un factor importante a tener en cuenta.