Deberá afrontar con el conflicto del handling y liderar a la compañía en la recta final del proceso de compra de Air Europa
MADRID, 28 Dic. (EUROPA PRESS) -
Iberia se prepara para un cambio de presidencia en los próximos meses y para cerrar 2023 con resultados históricos tras un año de gran crecimiento de la demanda en toda la red. El nuevo directivo deberá afrontar en su nuevo mandato temas trascendentales para la compañía como el conflicto del handling de Aena, así como la recta final del proceso de compra de Air Europa.
En mayo de este año la aerolínea española anunció que Fernando Candela asumiría de forma provisional el cargo de CEO y presidente de Iberia en sustitución de Javier Sánchez Prieto, y puso como fecha de caducidad a dicha interinidad "hasta final de año".
Candela sustituyó a Sánchez-Prieto en la presidencia el pasado mes de julio dando continuidad y estabilidad al ambicioso proyecto de crecimiento de la compañía tras la pandemia.
Lo más factible es que el nuevo presidente de la antaño considerada aerolínea de bandera española se dé a conocer el próximo mes de febrero coincidiendo con la publicación de los resultados financieros del año 2023, informaron a Europa Press en fuentes conocedoras.
Los últimos resultados conocidos en octubre cifraban en 449 millones de euros el beneficio operativo aportado por Iberia a su matriz IAG en el tercer trimestre, un 76% más gracias a la demanda en viajes de ocio y la casi total recuperación de los viajes corporativos, particularmente hacia América Latina y Estados Unidos.
ALGUIEN 'DE LA CASA'.
La compañía del grupo IAG aseguraba en mayo que el nombramiento de Candela tenía un carácter provisional, "hasta final de año", coincidiendo con sus planes de jubilación. Se acerca por tanto la fecha límite para que la línea aérea decida quién será su nuevo presidente y CEO en un momento clave como actual marcado por su fusión con Air Europa.
Todo apunta a que el nuevo directivo será alguien "de la casa" como suele ser habitual en la aerolínea. "Siempre consideramos candidatos externos e internos para ocupar cualquier puesto, pero es difícil que encontremos mejores perfiles para Iberia que los que tenemos dentro", afirmó Gallego esta primavera en un encuentro con medios de comunicación.
Entre los nombres mejor posicionados y de confianza en la aerolínea se sitúan el italiano Marco Sansavini, presidente de Vueling; el español Julio Rodríguez, director de Estrategia Comercial de IAG; o la argentina Carolina Martinoli, directora de Asuntos Corporativos, Sostenibilidad y Personas de IAG.
El economista Sansavini es un veterano del sector con trayectoria previa en otras aerolíneas como Alitalia o KLM. Por su parte Julio Rodríguez está familiarizado con la gestión estratégica desde 2017 y ha desempeñado cargos comerciales en firmas de bajo coste como Vueling, Niki y Air Berlin. Martinolli ya ha trabajado en Iberia y British Airways al frente de áreas relacionadas con la marca, clientes y marketing.
SEIS MESES COMPLICADOS.
En estos seis meses en el cargo, Fernando Candela ha debido hacer frente a la decisión del gestor aeroportuario Aena, de dejar a Iberia fuera de la gestión del servicio en tierra ('handling') en ocho de los principales aeropuertos de España (Barcelona, Palma de Mallorca, Málaga, Alicante, Gran Canaria, Tenerife Sur, Ibiza y Bilbao), aunque mantuvo el más grande el de Madrid-Barajas.
Esto ha supuesto un duro golpe para la compañía, que recurrió el concurso y mantiene abiertos procedimientos legales para tratar de recuperar parte del negocio.
Precisamente hoy el Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje (SIMA) ha citado a la dirección de Iberia con representantes de los sindicatos CC.OO, UGT y USO para impulsar un acuerdo que pueda frenar los cuatro días de huelga convocados entre el 5 y el 8 de enero, coincidiendo con el fin de semana de Reyes. Los sindicatos ya habían amenazado anteriormente con ocho días de paros coincidiendo con el fin de año que finalmente no se materializaron.
Iberia, que rechaza estos paros, asegura que los trabajadores tienen los derechos laborales y salariales garantizados, aunque defiende que la única solución contemplada es la subrogación a las empresas adjudicatarias del concurso de Aena, debido al alto coste y la falta de rentabilidad que tendría el autohandling.
Iberia había propuesto la creación un modelo "híbrido" participado por una empresa del Grupo IAG, "incluso explorando la posibilidad de que ese vehículo fuera 100 % del grupo en los aeropuertos donde tuviera sentido", que realizaría el 'handling' para todas las aerolíneas de IAG en los ocho aeropuertos.
Los sindicatos solicitaban un plan de viabilidad del negocio del 'handling' de Iberia; soluciones para los ocho aeropuertos afectados, en los que los trabajadores deben quedar amparados por el convenio de Iberia, y un ERE pactado si hay excedentes de plantilla.
La aerolínea insiste en que todos los puestos de trabajo en los servicios en tierra de los ocho aeropuertos están garantizados por la subrogación, por lo que no hay ni destrucción de empleo ni eliminación directa de puestos de trabajo, además de que se aseguran las condiciones laborales pactadas.
AVANZA LA COMPRA DE AIR EUROPA.
En este semestre, además, IAG ha avanzado en los trámites de la compra de Air Europa por Iberia, que formalizó ante la Comisión Europea el pasado día 11 de diciembre, una operación con un coste de 500 millones de euros por la totalidad del capital de la aerolínea de Globalia.
El grupo ha presentado a la Competencia europea un nuevo esquema de concesiones ('remedies') que califica de "muy ambicioso" con el objetivo de allanar la adquisición de Air Europa y cerrar un acuerdo con Bruselas a lo largo del próximo año. La nueva propuesta aumenta
significativamente la propuesta realizada en la anterior ocasión para garantizar una competencia fuerte en todas las rutas.
Durante el mandato de Candela el grupo IAG presentó los resultados de los nueve primeros meses del año, en los que ganó 2.151 millones, cifra que multiplica por más de diez los de ese periodo del año anterior. En esos nueve meses Iberia registró un beneficio de 821 millones de euros, más del doble que los 382 millones de 2019.
La aerolínea española se ha situado este año como la tercera mejor aerolínea de Europa y en el puesto 14 global según la clasificación World Airline Awards, los conocidos como 'Óscar de la aviación' que otorga Skytrax. Además, Iberia ha recibido el premio a la mejor marca de Customer Experience por la asociación DEC y el premio a la mejor tripulación del sur de Europa.