Suma 11.630 millones, según BNP Paribas
MADRID, 9 Ene. (EUROPA PRESS) -
La inversión en compras de activos inmobiliarios no residenciales cerró el ejercicio 2018 en máximos de los últimos diez años al sumar 11.630 millones de euros, importe que además es un 8% superior al de 2017, según datos de BNP Paribas Real Estate.
El máximo se logra toda vez que gran parte de los últimos diez años corresponden a los años de la crisis y el pinchazo de la 'burbuja' inmobiliaria que se generó antes de dicho periodo.
No obstante, según la firma, también se sustenta en la atracción que los activos inmobiliarios terciarios presentan para los inversores, dado el aumento de la demanda y las rentas de alquiler. La entidad también señala al exceso de capital en el mercado y la falta de otras alternativas de inversión.
De hecho, la inversión inmobiliaria se disparó un 58% en el último trimestre del año, de forma que en esos tres meses supuso 3.700 millones de euros, casi una tercera parte (un 31%) del volumen inversor de todo el año.
Por tipo de activos, los centros y locales comerciales acapararon una inversión de 4.280 millones de euros, un 23% más que en 2017 y el 36% del total. La 'operación estrella' en este segmento la protagonizó Sonae con la compra de tres centros comerciales por 480 millones.
Después se situó la compra de edificios de oficinas, a pesar que la inversión destinada a estos inmuebles descendió un 4%, hasta suponer 2.228 millones, como consecuencia de la "escasez" de activos con el cartel de 'se vende'.
RÉCORD DE INVERSIÓN EN LOGÍSTICA.
Por contra, el auge del comercio electrónico mantiene al alza el interés de los inversores por los centros logísticos, que registraron una inversión de 1.300 millones en 2018, un importe "récord" que además es un 30% superior a la de 2017.
En cuanto a los principales inversores, los fondos acapararon el 61% de las operaciones de compra de todos estos tipos de activos durante el pasado año, por delante de las socimis y los 'family offices'.