MADRID, 27 Abr. (EUROPA PRESS) -
La multinacional surcoreana LG Electronics registró unos beneficios netos de 546.500 millones de wones coreanos (369,3 millones de euros) entre enero y marzo de 2023, lo que supone una caída del 61% en comparación con el mismo trimestre de 2022, según ha informado este jueves la compañía.
La facturación del grupo en el primer trimestre decreció un 2,6%, hasta los 20,42 billones de wones (13.798 millones de euros). Por segmentos de negocio, la división de electrodomésticos creció un 0,6%, hasta los 8,02 billones de wones (5.419 millones de euros), mientras que el negocio de ocio doméstico se contrajo un 17,4% por la menor demanda de televisores en Europa, hasta los 3,36 billones de wones (2.270 millones de euros).
Los procedentes de la rama de componentes para vehículos experimentaron un crecimiento del 27,1%, hasta los 2,39 billones de wones (1.615 millones de euros) gracias a la revalorización de estas piezas en los mercados internacionales, al tiempo que el segmento de soluciones para las empresas facturó 1,48 billones de wones (1.000 millones de euros), un 21% menos tras la menor demanda de productos tecnológicos.
Por su parte, el coste de los productos vendidos durante el trimestre fue de 15,25 billones de wones (10.304 millones de euros), un 1,5% más, mientras que los gastos de venta y administrativos se redujeron un 8,4%, hasta los 3,67 billones de wones (2.480 millones de euros).
En cuanto al segundo trimestre de 2023, LG prevé que la incertidumbre en los mercados se sitúe al alza por los riesgos geopolíticos, tales como, cita la empresa, "las tensas relaciones entre Estados Unidos y China" y "el conflicto entre Rusia y Ucrania". Además, la multinacional contempla la posibilidad de que haya recesión global fruto de las subidas de tipos de interés y su impacto en el sistema financiero.
Por otro lado, LG cuenta con que las ventas interanuales crecerán en el segundo trimestre aupadas por las adquisiciones de componentes de vehículos y la mayor demanda de aire acondicionados.