MADRID, 30 Jun. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Enagás, Antonio Llardén, ha defendido los nombramientos como nuevos consejeros de la compañía de los exministros socialistas José Blanco y José Montilla, así como de Cristóbal José Gallego, miembro de la Comisión de Expertos para la transición energética que impulsó el anterior Gobierno de Mariano Rajoy y del Observatorio Crítico de la Energía, afín a Podemos, asegurando que "no les falta experiencia y conocimiento" del sector energético y aportarán un perfil "adecuado" ante la situación actual por la crisis del Covid-19.
La junta general de accionistas de Enagás ratificó este martes los 'fichajes' como consejeros de Blanco, Montilla y Gallego, elevando así el número de miembros de su consejo de los actuales 13 a 16, el número máximo de consejeros.
A preguntas de los accionistas en la Asamblea, celebrada de manera telemática debido a las limitaciones derivadas de la situación de riesgo para la salud pública como consecuencia de la pandemia, Llardén recordó que con la convocatoria de la junta se puso a disposición los informes de la Comisión de Nombramientos de la compañía que avalaban estos nombramientos y subrayó que su entrada en el consejo viene a añadir, "al talento del que ya se dispone, nuevos perfiles adecuados a esta nueva situación".
Asimismo, valoró que tanto a los dos exministros socialistas como a Gallego "no les falta experiencia y conocimiento en el sector energético". "Se consideran adecuados para este reforzamiento y estamos convencidos de que así lo van a entender la mayoría de los accionistas", indicó.
Por otra parte, los accionistas de Enagás también han dado su visto bueno al abono de un dividendo complementario de 0,96 euros brutos por acción, que se pagará el próximo 9 de julio.
Con esto importe, más el dividendo a cuenta de 0,64 euros pagado el pasado mes de diciembre, la retribución total correspondiente a 2019 a los accionistas de la empresa ascenderá a 1,6 euros brutos por título.
COMPROMISO CON LA POLÍTICA DE DIVIDENDOS.
En este sentido, Llardén ratificó el compromiso del grupo con su política de dividendo a futuro, con un incremento del 5% en la retribución a los accionistas este año y un aumento del 1% para 2021, 2022 y 2023.
A partir de 2024 y hasta 2026, el operador de la red gasista prevé un dividendo sostenible de 1,74 euros por acción. "El objetivo es seguir ofreciendo una atractiva remuneración, es una de nuestras principales prioridades", añadió el presidente de la compañía.
Asimismo la junta ha dado el visto bueno a la inclusión en los estatutos de la expresa previsión de que los dividendos puedan ser satisfechos total o parcialmente en especie.
No obstante, Llardén aclaró que Enagás no tienen "ninguna intención inmediata" de hacer uso de ello y añadió que se trata tan solo de la inclusión de una mejora técnica a semejanza de "la gran mayoría de empresas cotizadas".
Durante su discurso en la junta, el presidente de Enagás puso en valor el papel de la compañía durante la pandemia, garantizando un servicio esencial a través de un plan de contigencia que ha permitido al sistema gasista operar "con total normalidad".
Además, indicó que durante la crisis por el Covid-19 se descargaron un total de 74 barcos metaneros y destacó que se ha aprovechado la coyuntura de "precios bajos" para inyectar gas en los tres almacenamientos existentes "para estar preparados ante adversidades futuras".
COMPROMISO CON EL EMPLEO.
Llardén también apuntó el compromiso de Enagás con el empleo, tras la firma hace unos días del III Convenio Colectivo de la empresa para el periodo 2020-2023. "Las empresas tenemos una responsabilidad clara en este sentido", añadió.
Mientras, aseguró que la recuperación ante la actual crisis debe estar enmarcada en el contexto de la transición ecológica "como palanca de cambio", para lo que apostó por la innovación como un "vector fundamental" para la descarbonización.
A este respecto, señaló la apuesta por impulsar el hidrógeno verde como "un vector para la recuperación" que podría permitir a España posicionarse "como referente y puerta de entrada del hidrógeno", atrayendo así nuevas actividades industriales deslocalizadas que pueden contribuir a impulsar la industrialización.
No obstante, el presidente de Enagás advirtió de que la transición se debe afrontar "sin ideas preconcebidas y sin excluir ninguna tecnología".
OPERACIÓN EN TALLGRASS ENERGY.
Por su parte, el consejero delegado de la compañía, Marcelino Oreja, destacó la entrada de Enagás en el capital de la estadounidense Tallgrass Energy, tras alcanzar un 30,2% con la inversión de 1.623 millones de dólares (unos 1.445 millones de euros).
A este respecto, Oreja afirmó que se trata de "una operación pionera entre los TSO europeos" y que permitirá a Enagás compensar el recorte regulatorio y reforzar la sostenibilidad de su dividendo".