VALENCIA, 18 Jul. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, no tiene "ninguna duda" de que el comisario europeo de la Competencia, Joaquín Almunia, podría haber hecho más por los astilleros españoles. El ministro así lo ha indicado cuando se le ha preguntado por esta cuestión y por el impacto de la decisión de la Comisión Europea (CE) que obliga al sector naval a devolver las ayudas del tax lease entre 2007 y 2011.
García-Margallo ha realizado estas declaraciones antes de participar en el acto de clausura del foro organizado por la Oficina de Marca España en Valencia al que han asistido más de 150 empresarios de la Comunidad Valenciana.
El ministro ha recordado que "nunca" ha compartido los argumentos jurídicos que ha utilizado la Comisión sobre la devolución de las ayudas al sector naval. "Sobre todo me preocupa el impacto político de esta decisión", ha añadido.
El ministro ha destacado que una de las "grandes decisiones" que tiene que tomar la UE es ver "cómo se es capaz de tener una industria auténticamente europea compitiendo con países con condiciones fiscales, laborales, sociales, medioambientales muy bajos". Por este motivo, considera que la decisión tomada por la Comisión sobre el sector naval "no es una buena noticia para la industria europea".
El titular de Asuntos Exteriores ha explicado que lo que ha hecho la secretaria de Estado en la UE es argumentar "de forma distinta" al comisario, por lo que "no se pueden compartir ni los argumentos jurídicos, ni el transfondo político de la decisión para el futuro de la industria europea".
"UNA ECONOMÍA NO PUEDE SOBREVIVIR DE LOS SERVICIOS"
García-Margallo considera que Europa tiene que hacer un "enorme esfuerzo" para tener industria porque "no hay economía que pueda sobrervivir sobre la base de los servicios exclusicmvamente". El ministro cree que hay que producir bienes y hacerlo en condiciones competitivas "muy dificiles". "Producir un barco en Europa es infinítamente más caro que en otros países del mundo", ha matizado.
El ministros ha puesto como ejemplo el sector del automóvil para el que se han establecido cláusulas de salvaguardia en el acuerdo con Corea y también se estudian con Japón "para favorecer el sector de la automoción porque somos los segundo productores en Europa", ha recordado.
Respecto a un posible recurso, ha explicado que el Gobierno "no puede recurrir" y que son las agrupaciones de interés económico, y que serán obligadas a devolver las ayudas en la cuantía que se determine, "las que tienen que decidir si quieren plantear el recurso o no". De todas formas, el Gobierno "lo que ha hecho ha sido recurrir los argumentos jurídicos y la línea argumental que se debería plantear en el caso de hacer un recurso".