PARÍS, 7 May. (EUROPA PRESS) -
El grupo nuclear francés Areva, controlado por el Estado en un 87%, ha emprendido negociaciones con los sindicatos como parte del establecimiento del diálogo social en la empresa, que ha advertido de la necesidad de reducir sus costes en 1.000 millones de euros para 2017, lo que podría suponer un recorte de hasta 6.000 empleos en todo el mundo, aunque la mayor parte afectarían a Francia.
"La situación económica de la compañía requiere adoptar medidas inmediatas para ahorrar costes por importe de 1.000 millones de euros para 2017", indicó la empresa.
De este modo, además de reducir sus inversiones y adoptar medidas para mejorar los resultados de sus compras, Areva pretende recortar sus costes laborales en un 15% en Francia y en un 18% a nivel internacional.
"Esperamos una reducción de entre 3.000 y 4.000 empleos en Francia y entre 5.000 y 6.000 globalmente", declaró a Reuters el responsable de Recursos Humanos de Areva, Francois Nogue.
Alcanzar este objetivo supondrá varias medidas: empleo, compensaciones, organización de la producción y jornada de trabajo, añadió la empresa, que apuntó que el impacto final sobre la plantilla dependerá de los ahorros alcanzados en otras áreas.
El conglomerado francés de ingeniería y energía nuclear sufrió pérdidas por importe neto de 4.834 millones de euros al cierre de 2014, lo que prácticamente multiplicaba por diez los 'números rojos' de 494 millones registrados por la compañía el año anterior.
Areva, que acumula cuatro ejercicios consecutivos en pérdidas tras el impacto negativo que para la industria nuclear representó el desastre de Fukushima (Japón), ya había adelantado en marzo junto a la publicación de sus resultados anuales que implementará un plan de mejora de la competitividad.