MADRID 22 May. (EUROPA PRESS) -
OHLA se ha adjudicado un contrato de la Administración de Carreteras Públicas de Noruega (Statens Vegvesen), valorado en 156 millones de euros, para llevar a cabo el diseño y la construcción del túnel de Gjonnes.
En concreto, la compañía española abordará la ejecución de un túnel de hormigón de aproximadamente 100 metros y otro de roca de unos 1.400 metros para el nuevo enlace por carretera comarcal entre Gjonnes y la autopista E18 en Strand, con una conexión posterior a Fornebu.
La infraestructura contará con dos carriles y tendrá una sección transversal, al mismo tiempo que se creará una nueva zona de intersección en Gjonnes con una conexión a Baerumsveien, según ha informado la compañía en un comunicado.
OHLA entró en Noruega con la adjudicación del EPC SKI en 2015, una iniciativa ferroviaria de 290 millones de euros que ya fue inaugurada en agosto de 2022. En 2017, dio el salto al mercado sueco con la adjudicación en consorcio del proyecto de mejora de la línea ferroviaria entre Lund y Arlöv (Malmö) por 295 millones, considerada la principal vía de comunicación por la que discurre el tráfico de la península escandinava con el resto del continente europeo.
Por su parte, en el metro de Estocolmo, OHLA se ha adjudicado cuatro contratos por un importe global próximo a los 330 millones y se posiciona como el mayor contratista de esta infraestructura.
Además, acomete el contrato Sockenplan fase 2 y Slakthusomradet, que incluye la construcción de un tramo de 1,2 kilómetros de una nueva línea de metro, que cuenta con dos vías y un túnel de servicio con una longitud total de 1.736 metros, así como la construcción de una nueva estación de metro, Slakthusomradet, con una profundidad de 50 metros bajo la superficie.
En la misma infraestructura aborda el proyecto Kungstradgarden en la que lleva a cabo dos túneles de vía única y uno de servicio, así como túneles transversales, con una longitud total de aproximadamente 4,5 kilómetros.
También realiza el contrato Gullmarsplan, que conlleva la construcción de dos túneles de línea y un túnel de servicio con una longitud total de 3,1 kilómetros, así como una estación subterránea de 300 metros de longitud, a una profundidad de casi 70 metros por debajo del intercambiador de transportes de Gullmarsplan, la tercera estación con mayor afluencia de viajeros del país.