MADRID, 8 Feb. (EUROPA PRESS) -
Diputados y senadores socialistas han saludado este martes el acuerdo económico y social alcanzado con empresarios y sindicatos y han subrayado que debe servir para avanzar de manera más consistente en las reformas y para que el PSOE vuelva a acercarse a su base social, durante una reunión a puerta cerrada en el Congreso de los Diputados en la que ha participado el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.
Según han relatado a Europa Press varios asistentes a la reunión, han saludado el acuerdo los diputados de Izquierda Socialista --Juan Antonio Barrio de Penagos, José Antonio Pérez Tapias y Manuel de la Rocha--, que llevan criticando la ruptura con los sindicatos desde el pasado mes de mayo, pero también han intervenido en esa línea el portavoz en la comisión de Trabajo, Jesús Membrado y el senador extremeño Francisco Fuentes.
El propio Zapatero había iniciado la reunión con una intervención pública muy centrada en el pacto y ha dedicado elogios a los sindicatos, pero también a los empresarios. Es más, en respuesta a lo planteado por los parlamentarios, se ha preguntado si de haber cambiado antes la cúpula de la patronal CEOE hubiese sido posible acordar también la reforma laboral.
El presidente respondía así a Manuel de la Rocha, que le ha recordado que el cambio de discurso del pasado mayo distanció al PSOE de parte de su base social, especialmente la reforma laboral que derivó en una huelga general. De la Rocha ha subrayado que es mejor hacer las reformas con consenso y ha pedido que se aproveche este pacto para retomar la iniciativa política y, además, para hacer un esfuerzo explicativo de las reformas.
Por su parte, Barrio de Penagos se ha referido a la situación de las cajas de ahorro para advertir de que no se ha debatido la importancia de su obra social y de que no deben reflotarse entidades con dinero público para luego venderlas a bajo precio. También ha opinado que esta es la última oportunidad de tener un debate sobre la conveniencia de una banca pública algo que, según ha replicado Zapatero, no está en los planes del Gobierno.
El jefe del Ejecutivo ha subrayado también que las cajas de ahorro no pueden hacer obra social si no tienen beneficios y ha asegurado que no tiene ninguna intención de que se vendan a bajo precio --ha ironizado con que Economía no lo permitiría--. Por otro lado, se ha mostrado dispuesto a hablar en la UE y posteriormente en el G20 sobre la necesidad de frenar la especulación con las materias primas alimentarias.
ESTADO AUTONÓMICO Y LAICIDAD
Zapatero también ha hecho una defensa del Estado autonómico y ha lamentado el centralismo que, a su juicio, aflora en los planteamientos de la derecha, a raíz de una intervención de Pérez Tapias, que ha llamado a defender el modelo.
El diputado por Granada ha aprovechado que Zapatero mencionó en su primera intervención la Ley de Igualdad de Trato para advertir de que en España perdura una discriminación enquistada, que es la casilla que aparece en la declaración de la renta para financiar a la Iglesia Católica con cargo al Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF).
Pérez Tapias ha pedido que se estudien vías para "modificar" esta discriminación y el jefe del Ejecutivo se ha mostrado dispuesto a hablar del asunto, pero lo ha redirigido al ministro de la Presidencia, Ramón Jáuregui.
Zapatero ha comparecido ante el grupo parlamentario flanqueado por el vicepresidente primero del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, y el portavoz parlamentario socialista, José Antonio Alonso, y acompañado también por los vicepresidentes segundo y tercero del Gobierno, Elena Salgado y Manuel Chaves, y por el secretario de Organización del PSOE, Marcelino Iglesias, además de por varios miembros del Gobierno.