El Popular apuesta por culminar ya la reordenación

MADRID, 13 Abr. (EUROPA PRESS) -

El presidente de Banco Popular, Angel Ron, insistió este martes que la reestructuración del sistema financiero iniciado a través del FROB debe concluir de manera "inmediata" para mandar un mensaje de tranquilidad a los mercados y devolverlos a la normalidad.

Durante su intervención en unas jornadas organizadas por ABC y Deloitte, Ron recalcó que la demora en el tiempo de este proceso es "perjudicial" para el sistema financiero en su conjunto.

"Es imprescindible que el proceso culmine de manera inmediata porque los mercados son miedosos y hay que enviarles un mensaje de tranquilidad", subrayó Ron, quien añadió que las entidades menos solventes y con un modelo menos recurrente deben ser reestructuradas.

Ron insistió en que la incertidumbre generada tiene efectos negativos sobre las entidades financieras sólidas y solventes, y subrayó que la reestructuración de las cajas, junto a la reestructuración del gasto público y el paro, son los tres ejes fundamentales para poder garantizar una recuperación de la confianza.

A su juicio, la recuperación de la confianza es "imprescindible" para que al economía retome el camino del crecimiento económico y el sistema financiero pueda colaborar a este fin.

Por otro lado, Ron señaló que la clave de la respuesta de qué entidades van a salir reforzadas de la crisis es el propio modelo de negocio, ya que se está hablando de la necesidad de volver a los orígenes.

GANAR CUOTA DE MERCADO.

En este sentido, señaló que ganar cuota de mercado es imprescindible pera sobrevivir y que recordó Banco Popular está centrado en la banca comercial, está mejorado la gestión del riesgo y está reduciendo las entradas netas en mora.

A su juicio, el capital, la lucha por la morosidad, la liquidez y la gestión comercial es fundamental en el entorno actual y, en este sentido, señaló que la mora del banco tocará techo en los próximos meses y que la del sector lo hará a lo largo del año, y recordó que cuenta con una segunda línea de liquidez de 18.000 millones de euros, que cubre sus próximos vencimientos.