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Rechaza "reformar la reforma laboral", confía en que se superarán las previsiones del Gobierno y aboga por mejorar el crédito no financiero
MADRID, 1 Sep. (EUROPA PRESS) -
El PP apuesta por reformar la tributación sobre las rentas, particularmente las derivadas del trabajo, teniendo en cuenta las "necesidades vitales", de tal manera que la base fiscal se calcule detrayendo los gastos necesarios para vivir del conjunto de ingresos que percibe un contribuyente.
El portavoz de Economía del PP en el Congreso, Vicente Martínez-Pujalte, explica en una entrevista a Europa Press que la reforma fiscal que el Gobierno ha comprometido presentar en el primer trimestre de 2014 buscará contribuir al equilibrio presupuestario a la par que se fomenta el empleo, el desarrollo sostenible y la equidad.
Así, aunque reconoce que habrá que esperar a la propuesta que presente el comité de expertos creado 'ad hoc' con este objetivo, el diputado murciano considera que se tendrá "muy en cuenta la equidad fiscal, que uno pague de acuerdo con las rentas que tiene" bajo el principio de 'primero vivir y luego pagar impuestos'.
"Es decir, que a las rentas que uno tiene hay que detraerle las necesidades vitales para determinar la base sobre la que tributar", ha precisado, haciendo hincapié en que "las rentas del trabajo son lo más importante y hay que primar que el trabajo sea el bien a cuidar".
BAJADA TRIBUTARIA
En cualquier caso, Martínez-Pujalte asegura que el Gobierno "va a respetar el compromiso que tiene con la bajada de impuestos", particularmente en lo relativo al gravamen complementario del IRPF introducido en 2011 para dos años pero que finalmente se aplicará también en el ejercicio de 2014.
Aunque sin precisar qué modificaciones podrían introducirse en el Impuesto de Sociedades, el 'popular' insiste en que "quien puede crear empleo en España son las pymes y los autónomos, por lo que hay que hacer un sistema tributario que fomente la contratación".
También la regulación de las Sicav podría revisarse, aunque el diputado recuerda que son una parte "pequeña" del total de la tributación y que cualquier cambio debe "compaginar que quien tenga pague con que España no pierda que venga mucha financiación". "Los inversores buscan las cosas más cálidas. Nadie se va a pasar el verano a Alaska, es preferible la Costa del Sol", añade.
En resumen, Pujalte asegura que la reforma que se haga tendrá, "por una parte, un componente de bajada de impuestos y un componente de construcción de un sistema tributario para el empleo y para la defensa del desarrollo sostenible", aunque sin olvidar su necesaria contribución al equilibrio ingresos-gastos.
Al margen de la reforma fiscal, el Gobierno seguirá trabajando en la lucha contra el fraude, ámbito en el que según el diputado "lo está haciendo muy bien" mientras que la Unión Europea "tiene que avanzar mucho más". "Se trata de que todos paguen menos impuestos pero que haya más que pueden pagar y que, además, todos paguen lo que tienen que pagar, que no estemos en un mundo donde algunos hacen trampas", ha añadido.
PRESUPUESTOS "CAUTOS"
En cualquier caso, es poco probable que los cambios tributarios que se incluyan en esta reforma integral tengan un impacto importante en los ingresos del año próximo, ya que su tramitación se prolongará al menos durante todo el primer semestre. Por ello, el Gobierno tendrá que ser "muy cauto a la hora de hacer previsiones de ingresos" en los Presupuestos Generales de 2014, que se presentarán en septiembre.
Unas cuentas que, según Martínez-Pujalte, tendrán como objetivo prioritario "muy claro" el crecimiento y la creación de empleo. "Se seguirán haciendo esfuerzos para ir consolidando fiscalmente las cuentas públicas, pero ya permitirán hacer alguna política más de dinamización económica. Hay que ser muy cautos en los ingresos y, por lo tanto, tampoco podrán ser muy expansivos en los gastos, pero creo que (son unos Presupuestos) más fáciles que los de años anteriores y con menos recortes", ha añadido.
Más fáciles, en parte, por la mejora de algunos indicadores económicos --prima de riesgo, exportaciones--, que han llevado al Gobierno a pronosticar que España saldrá de la recesión en el tercer trimestre de este año, y que acabará el ejercicio con una caída del 1,3% del PIB. Según el cuadro macroeconómico del Ministerio de Economía, en 2014 la economía crecerá medio punto y se cerrará la legislatura con un incremento del 0,9% del PIB.
Martínez-Pujalte se muestra, sin embargo, optimista, y cree que no sólo se podrán superar las previsiones más pesimistas de instituciones internacionales como el Fondo Monetario Internacional (FMI), sino que está "seguro de que se superarán incluso las previsiones del Gobierno".
"Se está produciendo un punto de inflexión en la curva de crecimiento. Eso no quiere decir que la crisis haya terminado ni mucho menos, no quiere decir que ya la semana que viene las familias que lo están pasando mal lo dejen de pasar mal o que la situación del empleo ya se vaya a arreglar. Lo que quiere decir es que da toda la impresión de que se ha acabado la curva descendente y vamos a empezar una cierta curva ascendente en el tercer trimestre, y que será mejor todavía en 2014", ha insistido.
QUEDA UNA "TEMPORADA LARGA" HASTA RECUPERAR EL EMPLEO
No obstante, el portavoz 'popular' es consciente de que los ciudadanos aún no notan los efectos de esta mejoría --"Aunque a las 60.000 personas que han encontrado trabajo en julio o a las que lo encuentren en agosto sí les ha llegado ya"--. Aun así, confía en que las familias españolas "irán notando" la recuperación a partir del próximo ejercicio porque "van a ver que donde había EREs hay ofertas de trabajo".
"En cualquier caso, la crisis no acabará hasta que España tenga una tasa de paro similar a la media europea, y para eso tardaremos una temporada larga", reconoce, añadiendo que "todavía queda mucho por trabajar, muchas reformas por hacer y mucho esfuerzo para consolidar ese cambio de tendencia y que llegue al conjunto de los ciudadanos".
En lo que se refiere particularmente a la creación de puestos de trabajo, Pujalte defiende como "muy positiva" la reforma laboral del Gobierno, que permitirá que España "sea capaz de crear empleo con tasas de crecimiento inferiores" a las que hacían falta hasta ahora.
"Empezar a decir que necesita otra reforma es levantar unas expectativas que creo que no ayudan. Si hay que hacer algún retoque, se hará en un sentido o en otro, pero lo que hay que hacer es aplicar bien la reforma hecha y valorarla en sus justos términos", añade, dirigiéndose a quienes piden más cambios en la actual normativa, como la patronal CEOE o la Comisión Europea (CE).
También contesta a las críticas de quienes acusan a la reforma laboral de precarizar el empleo, recordando que aunque el objetivo debe ser que el trabajo se dé en "un marco de contratos de calidad, de sostenibilidad en el tiempo y de estabilidad" lo importante en este momento es "hacer contratos". "Cualquiera que haya tenido un contrato y antes no lo tuviera lo agradece", ha afirmado.
MENOS FINANCIACIÓN BANCARIA
Parte de ese impulso a la actividad económica depende aún de una mejora en el acceso al crédito. Preguntado sobre la posibilidad de que el Gobierno apruebe nuevos estímulos de este tipo, Martínez-Pujalte ha señalado que "en el saneamiento de la banca ya se ha hecho todo el esfuerzo" y que eso "se traducirá en una mejora del crédito".
Así, en lo que se trabajará en esta segunda parte de la legislatura pasará más por "intentar que la economía tenga una financiación no bancaria proporcional a la de otros países" a través de figuras como el capital riesgo, los 'business angels' o los bonos de empresa, entre otras. Asimismo, hay que conseguir que las inversiones "tengan un grado de desapalancamiento mayor" y que no se hagan "fundamentalmente con financiación ajena, sino también con financiación propia".