MADRID, 1 (EUROPA PRESS)
La compañía pública francesa SNCF, la alianza entre Talgo y Globalia, y la firma Ilsa, propiedad de los dueños de Air Nostrum, son las tres compañías que han pedido entrar en la red AVE para prestar servicio de viajeros en tren en competencia con Renfe cuando en diciembre de 2020 se liberalice este mercado.
Adif ha recibido las solicitudes de capacidad de estas tres empresas, junto a la de la propia Renfe, una vez que en la medianoche de este jueves 31 de octubre terminó el plazo para presentarlas.
En virtud del modelo de liberalización diseñado, las empresas pueden pujar por alguno de los tres paquetes de servicios, cada uno con distinto número de frecuencias diarias de trenes, que Adif ofrece en tres corredores AVE. Se trata del AVE a Barcelona, el de Levante y el que une Madrid con Sevilla y Málaga.
No obstante, el primero de estos paquetes, el de mayor número de servicios, se considera 'destinado' a Renfe por ser la única empresa con capacidad para acometerlo.
De hecho, la operadora pública ha presentado oferta por este paquete, que supone poner en circulación en esas líneas 104 trenes diarios, un 20% más de los que la compañía ofrece actualmente.
Los otros dos paquetes en liza cuentan con 16 y cinco circulaciones de trenes AVE diarias en dichos corredores.
Entre las tres empresas que buscan hacerse con uno, o una parte, de estos servicios para entrar así a competir por Renfe figura SNCF. La compañía pública francesa, a través de su filial española Rielsfera, ha solicitado capacidad para traer a España el AVE 'low cost' que explota en Francia.
También ha solicitado capacidad Talgo. Con su filial Motion Rail, presidida por la exministra Elena Salgado, el fabricante de trenes finalmente se ha aliado con el grupo turístico Globalia y con el fondo Trilantic en calidad de socio financiero, según informaron a Europa Press en fuentes del consorcio.
La tercera firma que ha presentado solicitud para entrar en el AVE es Ilsa, sociedad de la familia propietaria de Air Nostrum, y lo ha hecho junto a un "socio industrial europeo de primer nivel", según indicaron en fuentes de la compañía, que declinaron desvelar la identidad del mismo.
PROCESO DE ADJUDICACIÓN.
A partir de ahora, Adif cuenta con alrededor de un mes y medio para analizar las ofertas recibidas con el fin de seleccionar a mediados del próximo mes de diciembre a los operadores que resulten adjudicatarios de capacidad en la red AVE.
La compañía que preside Isabel Pardo explicó que el análisis de las solicitudes se llevara a cabo por parte de una comisión de valoración formada por tres equipos de técnicos de Adif que, respectivamente, se centrarán en la evaluación administrativa, financiera y técnica de cada oferta.
En un comunicado, la compañía pública detalló que todos los integrantes de estas comisiones firmarán compromisos de confidencialidad y una declaración asegurando no estar en supuesto conflicto de interés.
Posteriormente, Adif rubricará con las empresas que resulten adjudicatarias un acuerdo marco de adjudicación de capacidad para prestar servicio antes del 15 de marzo de 2020, nueve meses antes de que el 14 de diciembre del próximo año el transporte en tren AVE se abra a la competencia, para que cuenten con tiempo para preparar su plan de negocio.
BAJADA DEL PRECIO DEL BILLETE.
El sector, la CNMC como regulador del mercado y el Ministerio de Fomento esperan que la apertura del AVE a la competencia se traduzca en un aumento de los viajeros que optan por este tipo de transporte y en una bajada del precio de los billetes.
A ello pretende contribuir el nuevo modelo de cánones que Adif prevé implantar ante la liberalización, esto es, el peaje o importe que la empresa pública cobra a los operadores por usar la red.
No obstante, con la competencia se persigue también rentabilizar la inversión de 51.000 millones de euros realizada en construir la red AVE, la segunda mayor de mundo.