SANTANDER, 22 Nov. (EUROPA PRESS) -
El catedrático de Estructura Económica de la Universidad Autónoma de Madrid Ramón Tamames asegura que la crisis está "arreciando" en España como consecuencia del "empacho" de deuda y los elevados niveles de déficit, y además ha alertado de las "posibilidades de contagio" que surgen en la actualidad ante la situación que atraviesan las economías de Irlanda, Portugal, Grecia y en menor medida Italia.
De hecho, Tamames augura una fase "muy difícil" para la economía española porque, aunque el Gobierno sostenga que la mejoría de los últimos meses va a atenuarse, él piensa que no ha habido tal mejoría y ha dejado claro que una subida intertrimestral del 0,1 por ciento, "puede ser el resultado de varios errores o desajustes y no significa absolutamente nada".
Lo que cuenta, en su opinión, es cuándo se van a recuperar los niveles de crecimiento del año 2007 y, en ese caso, la respuesta es "muy dura": "algunos no lo verán, porque va a llevar años", ha sentenciado el catedrático en rueda de prensa, antes de inaugurar el nuevo curso del Centro Montañés de Investigación y Desarrollo Empresarial (Cemide) con la conferencia 'Cuando la crisis arrecia: ajustes e internacionalización de la economía española'.
En su opinión, "la situación es más grave de lo que parece", las reformas "se han hecho muy lentamente" y los bancos "no están tan floridos como se dice". Además, prevé que las complicaciones financieras por estar dentro del euro van a ser "grandes", por las exigencias que eso supone en cuanto a la contención del déficit.
Con todo, Tamames reconoce que hay otros países que están "igual o peor" que España, como el caso de Irlanda, que tiene unos niveles de déficit "horripilantes" en torno al 30 por ciento, frente al 11,2% de España el pasado año.
A su juicio, esa situación financiera que es "grave" para Irlanda, Portugal y Grecia, y no tanto para Italia, afecta mucho a España "creando posibilidades de contagio", un "peligro" en el que, según dice, "la psicología es muy importante", porque si se empieza a pensar que España no va a cumplir las pautas del Fondo Monetario Internacional (FMI) y la unión monetaria europea se le puede "encarecer" el crédito.
Pero desde su punto de vista, "la gente no quiere ni pensar" que España tenga que pedir ayuda al Fondo de Rescate de la UE, porque en términos de Producto Interior Bruto (PIB) es "como diez veces" Irlanda, unas siete veces Portugal y entre seis y siete veces Grecia, por tanto, si a Irlanda se habla de prestarle unos 110.000 millones de euros, para España serían unos 500.000, y se acabaría el fondo.
En cualquier caso, a pesar de esas complicaciones financieras que pueden venir ligadas al euro, Tamames considera "absurdo" volver a la peseta. "Salirse de la unión monetaria sería un desastre total, porque entonces no nos prestaba un duro nadie", ha sentenciado el catedrático, quien considera que la solución no es sustituir una moneda por otra, sino complementar el sistema con mecanismos de ayuda como ocurre, por ejemplo, en Estados Unidos con la Reserva Federal.
"SEGAR" LA ADMINISTRACIÓN
Las claves para hacer frente a la situación son, para Tamames, sanear una administración "que es un armatoste" y "lanzar la idea" de que hay que internacionalizar la economía.
En lo que respecta a la primera de las propuestas, el catedrático ha apostado por ir a una administración "mucho más reducida", respetando los servicios básicos como la educación, la sanidad o los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, y empezando a "segar" lo demás.
En este sentido, aunque le pareció "muy desafortunado" que el líder del PP, Mariano Rajoy, propusiera aplicar en España el programa de David Cameron, reconoce la labor del primer ministro británico para "adelgazar" la nómina de la administración.
Tamames no piensa que en España se vaya a acometer un adelgazamiento en este momento, porque sigue primando el principio de garantizar el empleo de los funcionarios, pero cree que "habrá que plantearlo".
Es más, en su opinión, se debería empezar a actuar ya "por los que no son funcionarios", que según sus estimaciones representan en torno al 60 por ciento de la nómina de la administración y, a su juicio, son "pegotes" que han ido entrando por "amiguismo o clientelelismo".
INTERNACIONALIZACIÓN COMO "TABLA DE SALVACIÓN"
La otra clave para reconducir la situación es, en palabras del catedrático, la internacionalización, que puede ser "una de las tablas de salvación", ya que el mercado interno va a seguir "en declive durante años".
Ha puesto el ejemplo de las empresas del Ibex 35, que iniciaron la internacionalización hace tiempo y ahora tienen "más de la mitad de su negocio fuera". Ha aludido, entre otras, a las constructoras y los bancos, que "mal que bien están resistiendo la crisis", gracias a esa apuesta por la internacionalización.
Asimismo, ha señalado los casos de otras empresas "de tipo nuevo" que introducen nuevas tecnologías y mucha innovación en cuestiones como la gestión de los stocks o márketing, y también están afrontando mejor la crisis. En este grupo ha incluido a Inditex, Mango, Abengoa, Gamesa o Indra.