MADRID, 29 Ene. (EUROPA PRESS) -
Telefónica Brasil, TIM y Claro (América Móvil) han formalizado la compra de los activos de telefonía móvil de la operadora brasileña Grupo Oi, de los que habían sido declaradas ganadoras en la subasta judicial celebrada el pasado mes de diciembre por un importe conjunto de unos 16.500 millones de reales (unos 2.656 millones de euros).
En un comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Telefónica informa de que su filial en el país brasileño, junto con TIM y Claro, formalizaron este jueves el contrato de compraventa de estos activos con Oi Móvel.
En este sentido, informa de que la efectividad de esta adquisición por parte de los compradores está sujeta a determinadas condiciones habituales en este tipo de transacción y que están previstas en el contrato de compraventa, incluida la obtención de las correspondientes autorizaciones regulatorias.
Asimismo, la compañía de telecomunicaciones añade que esta operación de compra debe realizarse conforme a lo recogido en el "plan de segregación" de dichos activos móviles del Grupo Oi, que contempla que cada uno de los compradores adquirirá acciones de una unidad que contenga los activos que le corresponden en el reparto acordado.
En un comunicado remitido a la Bolsa de Brasil, Telefónica añade que esta operación, una vez completada, aportará beneficios a los accionistas de la compañía a través de la generación de ingresos y eficiencias por sinergias operativas, así como a sus clientes, gracias a su compromiso con "la excelencia en la calidad de los servicios brindados".
Además, añade que la operación también tendrá un impacto positivo para el sector en su conjunto, ya que refuerza su capacidad para realizar inversiones y desarrollar innovaciones tecnológicas "de manera sostenible", contribuyendo a la digitalización del país.
Grupo Oi aceptó el pasado 14 de diciembre de 2020 la oferta de Telefónica, TIM y Claro por sus activos móviles, la única que se presentó a la fase final del proceso de subasta tras la retirada de la empresa brasileña de infraestructuras Highline do Brasil, propiedad del fondo estadounidense Colony Capital.
La oferta de 16.500 millones de reales brasileños (unos 2.500 millones de euros al cambio actual) incluye 756 millones de reales brasileños (115 millones de euros) destinados a los servicios transitorios que serán prestados por el Grupo Oi a los oferentes durante hasta doce meses, así como el compromiso de celebrar contratos a largo plazo para la prestación de servicios de capacidad de transmisión a través de sus infraestructuras.
Telefónica desembolsará una cantidad correspondiente al 33% del precio base y los servicios transitorios, equivalente a 5.500 millones de reales brasileños (unos 833,2 millones de euros), así como un importe del 22% del valor actual neto del acuerdo de capacidad, unos 179 millones de reales brasileños (unos 27,12 millones de euros).
De esta manera, Telefónica Brasil será responsable de un conjunto de activos compuesto por unos 10,5 millones de clientes (correspondientes al 29% de la base total de telefonía móvil del Grupo Oi), 43MHz de espectro como promedio nacional ponderado por población (46% de las radiofrecuencias) y contratos de uso de 2,7 miles de 'sites' de acceso móvil (19% del total de 'sites' de telefonía móvil).
PROCESO DE REESTRUCTURACIÓN
Oi, la cuarta operadora de telefonía móvil de Brasil, anunció el pasado mes de junio que, en el marco de su proceso de reestructuración, iba a llevar a cabo la segregación de sus activos, pasivos y derechos de recuperación de las entidades asociadas en cuatro Unidades de Producción Aisladas (UPI, por sus siglas en inglés).
En el caso de la unidad de activos móviles, Oi detalló su intención de vender el 100% de la compañía mediante un proceso de subasta, que estaba previsto para este cuarto trimestre de 2020, tal y como ha sucedido finalmente, con un precio mínimo de 15.000 millones de reales (unos 2.273 millones de euros), que deberá ser abonado en efectivo.
Highline do Brasil presentó inicialmente la mejor oferta económica por los activos móviles, superando así la realizada por Telefónica, TIM y Claro, que llevó a la compañía a firmar un acuerdo de exclusividad con Oi. Sin embargo, las negociaciones entre ambas partes no llegaron a buen puerto y Oi inició conversaciones con el consorcio que sí desembocaron en su designación con primer licitador.