BRUSELAS, 17 Jun. (EUROPA PRESS) -
La cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea que se celebró este jueves en Bruselas no incluía en su agenda abordar la situación de España pero la mayoría de los líderes europeos terminaron mostraron su apoyo al país ante los persistentes rumores sobre un posible rescate financiero por parte de la UE.
El presidente permanente del Consejo, Herman Van Rompuy, llegó incluso a decir que presidía por primera vez una cumbre "normal" porque no había "ninguna crisis". "Son las 10:30 y no hay ninguna crisis", lanzó en su discurso inicial ante los líderes europeos. De hecho, desde principios de año todas las cumbres europeas han estado marcadas por el rescate de Grecia o por la creación del fondo de rescate de 750.000 millones de euros para frenar el contagio a España y Portugal.
Van Rompuy también felicitó al presidente del Gobierno, José Luis Rodriguez Zapatero, por las medidas de ajuste que ha adoptado para reducir el déficit y calmar a los mercados, medidas que calificó de "valientes y eficaces". Y el primer ministro luxemburgués y presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker, consideró que van "en la dirección correcta".
Un elogio similar le dedicó la canciller alemana, Angela Merkel, que consideró "muy importantes" las decisiones adoptadas en España para afrontar la crisis, especialmente las relacionadas con la reforma del mercado laboral.
"Hemos apoyado todas esas medidas y considerado que son muy importantes, incluidas las que han sido tomadas en el mercado de trabajo", explicó Merkel, cuyo país está en el origen de las especulaciones sobre la mala salud financiera de España y la preparación de un rescate europeo.
No obstante, la canciller describió como "absolutamente amistoso" el ambiente del almuerzo de trabajo que compartieron los líderes cuando se le preguntó si había habido tensiones por los rumores de los últimos días que apuntaban a España y aseguró que "no se habló de ningún país en particular".
Muy rotundo se mostró también el presidente francés, Nicolas Sarkozy, al responder categórico con un 'No' a la pregunta de si había que preocuparse por la situación española. "Todo adjetivo a este 'no' o todo complemento a este 'no' debilitaría el 'no'", apostilló en tono distendido antes de añadir que los 27 tienen plena confianza en las autoridades españolas. "Tenemos confianza en las autoridades españolas, plena confianza", aseguró.
La misma línea siguió el primer ministro portugués, José Sócrates, que tachó de "especulaciones sin sentido ni fundamento" destinados a aumentar el ataque especulativo de los mercados contra la zona euro los rumores acerca de España.
El presidente de la Eurocámara, el conservador polaco Jerzy Buzek, admitió por su parte que España vive "momentos difíciles" pero se mostró convencido de que los superará "en un futuro próximo" recordando que España "fue la historia de un éxito durante 25 años" tras tomar "decisiones muy importantes" para "reformar el país" y por lo tanto que, a su juicio, la actual situación española es "muy similar".
ZAPATERO DEFIENDE LA SOLVENCIA
Por su parte, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, insistió en que las informaciones que apuntan al rescate para la economía española son "sólo rumores" e instó a los medios de comunicación a que "se crean lo que España dice" y negó que la visita que hará este viernes a España del director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Dominique Strauss-Kahn, tenga algo que ver con negociar líneas de crédito flexibles para el país.
Además, defendió la "gran solvencia" del sistema financiero español alegando que, pese a la crisis financiera, no ha necesitado inyecciones de liquidez y que sólo se han intervenido "dos entidades menores", en referencia a Caja Castilla-La Mancha y Cajasur.