MADRID 22 Nov. (EUROPA PRESS) -
La sección sindical UGT-FICA Azucarera ha trasladado este viernes su preocupación por las "gravísimas consecuencias" que traerá la firma del tratado de libre comercio entre la Unión Europea y el Mercosur para la industria azucarera, cuya negociación se reabre el lunes 25 de noviembre en Brasil con el encuentro de los principales líderes.
La remolacha azucarera es un cultivo estratégico y de los principales activos agroindustriales en Castilla y León y Andalucía, las principales comunidades autónomas productoras de azúcar y en las que se encuentran las cinco fábricas azucareras y los centros de envasado del país. El cultivo se da también en País Vasco, La Rioja, Navarra y Aragón.
Según ha expuesto el sindicato, el tratado prevé permitir la entrada en la Unión Europea de 190.000 toneladas de azúcar libres de aranceles, procedentes en su mayoría de Brasil, primer productor mundial. Este volumen se uniría a la concesión realizada por la UE al azúcar de Ucrania, que ha pasado de 21.000 toneladas en 2021 a más de medio millón en el año en curso.
Este volumen brasileño hundiría los precios y pondría en riesgo la competitividad de la industria y los remolacheros europeos, como así lo han denunciado tanto la Organización de los Remolacheros Europeos (CIBE) como el Comité Europeo de Fabricantes de Azúcar (CEFS), recuerda el sindicato.
Sobre el impacto de la medida en el sector remolachero-azucarero, se podría dar una situación "delicada" tanto para la industria como para los productores remolacheros. "Esta dependencia no creemos que sea lo que quiere la UE y no es descabellada", ha explicado la sección sindical de UGT-FICA.
Además, la anterior pérdida de competitividad tiene lugar, no solo por la sobreabundancia de azúcar, sino por la situación bajo la que se va a permitir esta concesión, ya que el azúcar producido en estos países "no tendrá que cumplir los requisitos y exigencias que se demandan a los remolacheros y la industria europeos", según el sindicato.
Como ejemplo de algunos de estas exigencias, inspiradas en el Pacto Verde Europeo, cabe señalar a los principios activos para luchar contra plagas y enfermedades del cultivo. Desde 2017 la remolacha ha perdido el derecho de uso en la UE de 32 sustancias activas, lo que complica mucho el manejo del cultivo para los remolacheros.
Esto se traduce en menores producciones y mayores costes para intentar paliar estas situaciones en muchos casos sin solución alternativa.
"Todo esto se ignora para el azúcar que vendrá de Iberoamérica y se está ignorando en la actualidad para el azúcar que procede de Ucrania. Es decir, la UE da ventajas competitivas a los productores no comunitarios y penaliza a los propio", ha denunciado el sindicato.
Ante esta situación que consideran "inaceptable" y que pudiera poner en riesgo el empleo del sector, así como las producciones de unos 150.000 remolacheros europeos, desde la Sección Sindical de UGT-FICA en Azucareras han exigido a los representantes políticos "que no pongan en peligro" las producciones locales de España y que no penalicen el medio de vida de los trabajadores del sector.
"Estas políticas europeas que pudieron haber tenido algún sentido en el pasado pero, que, ahora, con el nivel de exigencias agrícolas derivadas del Pacto Verde, son un gran error que van diametralmente en contra de los intereses del sector. Reclamamos a todos nuestros representantes políticos pongan freno a este despropósito", ha concluido la sección sindical.