MADRID, 31 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) ha denunciado la importación de leche y derivados procedentes de Francia, Alemania y Portugal, que están exportando leche por debajo de costes para dar salida a sus excedentes durante la crisis del coronavirus, según señala en un comunicado.
En concreto, la organización agraria ha cuantificado hasta 30 camiones cisterna diarios, lo que supone alrededor de un millón de litros. Esta leche estaría destinándose a abastecer el incremento de demanda que se está dando en las superficies comerciales por los cambios en los hábitos de compra debido a la crisis por el coronavirus.
UPA denuncia que esta situación está siendo aprovechada por los países con excedentes en su producción láctea para saldar sus exportaciones de leche líquida y derivados (sobre todo queso alemán), de cara al mercado español, con precios sobre los 0,14 euros/litro, lo que puede provocar una caída en cascada de las cotizaciones de leche en origen.
Así, las empresas de envasado y transformación están enviando cartas a sus ganaderos en Francia para pedirles que bajen su producción porque no encuentran mercado para colocar la leche salvo enviándola a España.
UPA califica de "inexplicable" esa situación, mientras a otros ganaderos de España se les están anunciando restricciones a su producción por parte de sus industrias. Tampoco se explican la importación "muy importante"" de quesos de Holanda y Alemania, mientras que el queso español, en especial de oveja y cabra, está cayendo "en picado".
La organización agraria ha pedido a las Administraciones públicas, tanto a los ministerios de Agricultura y de Consumo, como a las comunidades Autónomas, que extremen la vigilancia en este sentido. Además, solicita que se hagan públicos los datos de entrada de leche a España, así como que se extreme el seguimiento de trazabilidad de las cisternas para impedir que la leche que transportan no acabe envasada como leche con 'origen España'.
UPA recuerda que el estado de alarma "no invalida" la Ley de la cadena alimentaria, que sigue plenamente vigente en estos días. "La cadena agroalimentaria debe aportar estabilidad en estos días aciagos, y ningún agente debe tratar de hacer negocio aprovechando la coyuntura que estamos atravesando. Los ganaderos estamos dando lo mejor en esta situación y las industrias deben hacer lo propio e impedir que unos desalmados revienten el mercado", recalcan.