MADRID, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -
El directorio ejecutivo del Banco Mundial ha aprobado este viernes un préstamo de 350 millones de dólares (unos 322 millones de euros) para Uruguay que marca un hito a nivel global al vincular por primera vez las condiciones de financiación con el cumplimiento de ambiciosas metas ambientales.
Dirigido a apoyar el programa de reformas para impulsar una economía más sostenible y un crecimiento sólido y resiliente, el préstamo podría tener una reducción de hasta 12,5 millones de dólares (11,5 millones de euros) en sus intereses si Uruguay logra una disminución verificable en la intensidad de las emisiones de gas metano del sector ganadero.
El vicepresidente del Banco Mundial para América Latina y el Caribe, Carlos Felipe Jaramillo, se ha mostrado orgulloso de que un país de América Latina sea el primero en beneficiarse de un mecanismo innovador que incentiva acciones para proteger el planeta.
"En un momento en que urgentemente necesitamos redoblar esfuerzos para enfrentar la crisis climática, Uruguay muestra de nuevo un liderazgo global a través de innovaciones institucionales y financieras que sirven de referencia para otros países en desarrollo", ha afirmado.
FOMENTAR EL CRECIMIENTO ECONÓMICO SOSTENIBLE
Uruguay enfrenta el desafío de fomentar su crecimiento económico de forma dinámica y sostenible mientras refuerza su resiliencia ante impactos climáticos cada vez más intensos y frecuentes.
En este contexto, el préstamo respalda medidas clave que contribuyen a una economía verde, incluyendo regulaciones para promover la producción orgánica, incentivos para la conservación de bosques nativos, la protección del hábitat y biodiversidad terrestre y marina, la innovación, y la generación de un marco institucional para la producción de hidrógeno y otros combustibles verdes.
Adicionalmente, el préstamo apoya medidas que contribuyen a un crecimiento sólido y resiliente, a través de la coordinación de medidas de integración comercial con socios regionales, la mejora del marco de competencia y la profundización de los mercados financieros.
La ministra de Economía y Finanzas de Uruguay, Azucena Arbeleche, ha señalado que la aprobación de este instrumento de préstamo es otro paso "innovador" del país en la búsqueda de mejores condiciones de acceso al financiación internacional.
MEJORA DE LAS CONDICIONES
A partir de 2028, durante el período de pago del préstamo, se llevará a cabo una evaluación anual para seguir de cerca el objetivo de reducción de intensidad de las emisiones de metano en el sector ganadero en Uruguay. Se busca una reducción de al menos el 33% en la intensidad de las emisiones de metano por unidad de producto entre 2028 y 2032, y al menos del 36% entre 2033 y 2037.
En caso de haber cumplido con esta meta, el Banco Mundial mejorará las condiciones de repago del préstamo para ese año mediante una reducción de la tasa de interés.
Esta innovación financiera está alineada con la nueva Hoja de Ruta para la Evolución del Banco Mundial, que busca crear incentivos para los países que se esfuerzan por integrar desafíos globales como la mitigación del cambio climático en sus estrategias de desarrollo.