MADRID 12 Dic. (EUROPA PRESS) -
Western Gate, la división de inversión perteneciente al 'family office' de Luís Amaral y propietario del 2,18% de Dia, ha mostrado su apoyo al acuerdo de financiación y la agrupación ('contrasplit') de las acciones del Grupo Dia, según informa en un comunicado.
En concreto, el accionista minoritario de la cadena de supermercados considera que estos pasos son "necesarios como parte de una estrategia más amplia y crítica" que el consejo debe implementar para abordar la "significativa infravaloración" de Dia en relación con sus competidores y para restaurar la vital liquidez del mercado.
En los últimos años Western Gate se comprometió con el consejo para exigir cambios "urgentes y críticos" en la enseña para dar a conocer su cambio operativo, mejorar su perfil y reputación en el mercado, y construir un impulso positivo en torno al negocio.
El accionista minoritario sigue "profundamente preocupado" por la falta de compromiso de la compañía con el mercado y el impacto perjudicial que ha tenido en su valoración bursátil.
De esta forma, considera que el anuncio de la refinanciación de ayer es un primer "paso positivo". "Esperamos con interés el Día del Inversor de Dia en marzo de 2025 para entender mejor los pasos que la compañía está dando para abordar los cambios reales necesarios para impulsar su transformación, incluso una mejor representación de los accionistas minoritarios", ha señalado.
"Acogemos con satisfacción el anuncio de ayer como un primer paso positivo, pero es solo el comienzo de los cambios necesarios en Dia. Esto marca un hito clave en nuestra campaña, y pedimos al consejo que trabaje con nosotros para desbloquear el valor, abordar la significativa infravaloración de Dia e impulsar la transformación que la compañía necesita desesperadamente", ha asegurado Luís Amaral.
Western Gate es uno de los miembros de una coalición compuesta por más de 50 accionistas de la cadena de supermercados, que se han unido impulsados por la preocupación sobre la significativa infravaloración de la enseña en relación con sus compañías cotizadas comparables y la falta de transparencia del consejo.