MADRID 6 Jun. (EUROPA PRESS) -
Un consorcio formado por CAF, FCC y Revenga se ha impuesto en la licitación abierta por Adif para llevar a cabo el despliegue de la señalización y la gestión del tráfico ferroviario en el tramo Madrid-Almería, vital para el impulso del Corredor Mediterráneo, por 214 millones de euros.
La unión temporal de empresas (UTE) ganadora del contrato está participada por CAF Signalling, FCC Industrial e Infraestructuras Energéticas y Revenga Ingenieros, y dotará a la nueva línea de 200 km y al ramal Pulpí-Águilas de equipos de última tecnología para gestionar el tráfico de trenes en remoto y tiempo real, según informa el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible en un comunicado.
En concreto, se han contratado las obras para desplegar el sistema de señalización y gestión de tráfico ERTMS-2, dando un impulso "decisivo" al desarrollo de esta línea de alta velocidad.
MANTENIMIENTO DE TODOS LOS SISTEMAS Y EQUIPOS DURANTE CUATRO AÑOS
Así, se instalará este sistema de control y mando del tren, así como el resto de los equipos asociados: enclavamientos, sistemas de protección del tren, auxiliares de detección ante eventuales caídas de obstáculos en la vía, control de tráfico centralizado y telecomunicaciones para la operativa ferroviaria.
Asimismo, el contrato adjudicado a la UTE incluye el mantenimiento de todos los sistemas y equipos durante cuatro años. De esta manera, según informa el ministerio, el desarrollo de la línea de alta velocidad Murcia-Almería, "eje estratégico del Corredor Mediterráneo", representa una inversión de 3.500 millones de euros.
En la actualidad, todos los tramos de la plataforma de la línea están finalizados o en construcción y ya están en marcha los primeros trabajos de electrificación, mientras se avanza en los proyectos para montar las vías.
En este contexto, la nueva línea integrará Almería en la red de alta velocidad, a través del Corredor a Levante, en el Corredor Mediterráneo y las redes europeas, favoreciendo la vertebración y cohesión de territorios.