MADRID, 23 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno ha aprobado la modificación del nombre oficial de la estación madrileña de Chamartín, incluyendo ahora a Clara Campoamor, una de las principales impulsoras del voto de las mujeres durante el primer año de la II República, en 1931.
De esta forma, tal y como lo confirma el Boletín Oficial del Estado (BOE) de este miércoles, la icónica estación pasará a llamarse ahora 'Estación de Madrid-Chamartín-Clara Campoamor'.
El Gobierno enmarca este cambio en el 90 aniversario del voto femenino en España el próximo 1 de octubre de 2021, así como en la remodelación que se está acometiendo en todo el área en la que se encuentra la estación.
"Para honrar su memoria, en reconocimiento y respeto a su papel histórico y como recordatorio de su importante legado en la cultura democrática de nuestro país, el Ministerio de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática y el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana han elevado al Consejo de Ministros el informe sobre el cambio de denominación de la Estación de ferrocarril de Madrid-Chamartín, para que pase a denominarse Estación de Madrid-Chamartín-Clara Campoamor", defiende el Gobierno.
Este cambio ha sido sometido a un trámite de audiencia tanto con la Comunidad Autónoma de Madrid y el Ayuntamiento de Madrid como con el administrador de las infraestructuras ferroviarias, la entidad pública empresarial Adif-Alta Velocidad.
SUFRAGIO UNIVERSAL EN ESPAÑA
Clara Campoamor, licenciada en Derecho, se convirtió con 36 años en una de las pocas abogadas españolas de la época, incorporándose al Colegio de Abogados de Madrid, en donde ya estaba colegiada Victoria Kent, su gran rival parlamentaria.
Clara Campoamor mantuvo una gran actividad como conferenciante defendiendo siempre la igualdad de derechos de la mujer y la libertad política. Tras proclamarse la II República, fue elegida diputada por Madrid, por el Partido Radical, en las elecciones de 1931. Entonces las mujeres podían ser elegidas, pero no podían votar.
En 1931 formó parte de la Comisión Constitucional que elaboró el proyecto de Constitución y el 1 de octubre y después de un airoso debate frente a Victoria Kent se aprobó el artículo 36 que posibilitó el voto femenino. Las mujeres pudieron votar por primera vez el 19 de noviembre de 1933 en las elecciones generales.