MADRID 9 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible ha despejado totalmente el interior del túnel de Atocha-Chamartín, tras retirar el tren accidentado el 19 de octubre, en una operación "sin incidencias ni afectación a los servicios de alta velocidad", según ha informado este lunes en un comunicado.
El plan de trabajo, definido como "de gran complejidad técnica", se ha desarrollado de manera coordinada entre Renfe, Adif, Alstom y Gescrap, compañía especializada en la gestión logística de residuos metálicos y contratada para apoyar los trabajos de retirada del tren, cuyos restos se han destinado a reaprovechamiento industrial, aprovechamiento tecnológico para Renfe y reciclaje.
La operación, que comenzó el 5 de noviembre y finalizó esta semana, se diseñó específicamente para ejecutarse en horario nocturno, en concreto entre las 00.30 y las 4.30 horas, franja en la que no se registran circulaciones ferroviarias.
De esta manera, se pretendía garantizar que el tráfico ferroviario de alta velocidad, tanto de Renfe como de otros operadores, "no sufriera afectaciones en ningún momento".
Las labores se organizaron en varias etapas diseñadas para seccionar y retirar por piezas el tren accidentado, donde en la primera hora, entre las 00.30 y las 1.30 horas, los operarios quitaron las lonas protectoras y posicionaron las máquinas necesarias para el corte del tren.
A continuación, entre las 1.30 y las 02.30 horas, se procedió al corte de las piezas del tren con maquinaria especializada.
En la tercera fase, entre las 2.30 y las 3.30 horas, se trasladaron las piezas cortadas al exterior del túnel utilizando locomotoras y otros equipos de carga.
Y en la última hora de la jornada, entre las 3.30 y las 4.30 horas, se realizó la limpieza de la vía, se reubicaron las lonas protectoras y se dejó "todo listo" para la reanudación del tráfico ferroviario de alta velocidad al amanecer.
Después de concluir las labores en el interior del túnel, se trasladaron las secciones retiradas del tren accidentado a los talleres de Fuencarral, donde se procedió tanto al tratamiento de los residuos metálicos como la evaluación y la recuperación de las piezas que se encontraban "en condiciones óptimas" para su reutilización.
"Este logro fue posible gracias a una planificación y una ejecución precisas, que permitieron mantener operativos los servicios ferroviarios en todo momento, sin incidencias ni afectaciones para los usuarios, a pesar de la magnitud de las labores", han señalado desde el Ministerio de Transportes.
Con esta operación finalizada, el túnel de alta velocidad Atocha-Chamartín ha quedado "completamente despejado y listo para continuar operando con normalidad".