VALÈNCIA 26 Nov. (EUROPA PRESS) -
El pleno del Consell ha tomado razón de la declaración de emergencia efectuada por la Conselleria de Agricultura, Agua, Ganadería y Pesca para la recogida y destrucción de cadáveres de animales, así como el apoyo al suministro de pienso y reposición de la actividad ordinaria de las explotaciones ganaderas como consecuencia de la dana del 29 de octubre.
Esta medida, que se puso en marcha el pasado 30 de octubre, incluye animales fallecidos tanto de explotaciones ganaderas como domésticos y de compañía de particulares. Se estima un coste total de 2,7 millones de euros, en base al gasto realizado por Tragsa hasta la actualidad y a todas las tareas pendientes de realizar.
Desde Agricultura explican que era fundamental retirar con la mayor rapidez posible los cadáveres y proceder a una limpieza y desinfección adecuada tras las inundaciones, así como asegurar que los animales muertos fueran eliminados de manera segura, con el objetivo de reducir los riesgos para la sanidad animal, la salud pública y el medio ambiente.
Además, es necesario proporcionar apoyo a los titulares de explotaciones ganaderas por las dificultades de acceso a las instalaciones para dar el alimento al ganado y volver a su actividad ordinaria.
20 MILLONES PARA REPARAR INFRAESTRUCTURAS AGRARIAS
Por otro lado, el pleno ha tomado razón de la declaración de emergencia efectuada por la Conselleria de obras por un importe de 20 millones de euros para la reparación de daños en infraestructuras agrarias en la provincia ocasionadas por la dana.
Agricultura reparará daños producidos sobre las infraestructuras agrarias en los municipios afectados de la comarca de La Plana de Utiel-Requena, con un presupuesto de 4.100.000 euros; en La Hoya de Buñol, Los Serranos y El Camp de Túria, por un importe de 5.425.000 euros; en l'Horta Sud, también por un importe de 5.425.000 euros, y en la Ribera Alta y la Ribera Baixa por 4.760.000 euros.
A todo ello se suman 290.000 euros en materia de coordinación de seguridad y salud y de apoyo a la dirección facultativa de las obras de reparación de daños producidos en infraestructuras agrarias en los municipios de las comarcas afectadas.
Durante los días siguientes a la dana, la Conselleria visitó los términos municipales afectados, junto a representantes del sector agrario y de los regantes de las localidades, para comprobar el estado de las explotaciones e infraestructuras y evaluar los daños.