MADRID 17 Sep. (EUROPA PRESS) -
Una nueva revisión es la primera en revelar el alcance de la exposición humana a sustancias químicas en contacto con alimentos (FCC, por sus siglas en inglés), ya que se han encontrado en el cuerpo humano 3601 sustancias químicas utilizadas en envases de alimentos y otros artículos en contacto con alimentos. Así, expertos de la Fundación del Foro de Envases Alimentarios en Suiza, afirman que esta revisión también destaca lagunas significativas en los datos de biomonitoreo y toxicidad.
En concreto, en un nuevo estudio, publicado en el 'Journal of Exposure Science and Environmental Epidemiology', los científicos describen la exposición humana generalizada a sustancias químicas en contacto con alimentos (FCC). La investigación revela qué sustancias químicas utilizadas en envases de alimentos y otros artículos en contacto con alimentos se han encontrado en muestras humanas, como orina, sangre y leche materna. También destaca lagunas significativas en los datos de biomonitoreo y toxicidad. Los datos están disponibles en una herramienta interactiva, la base de datos FCChumon, que fue compilada por un equipo de investigadores del Food Packaging Forum, junto con colegas de cuatro instituciones académicas.
En un enfoque sistemático, los autores compararon más de 14.000 FCC conocidos con datos de cinco programas de biomonitoreo humano, tres bases de datos de metabolomas/exposomas y la literatura científica. Esto reveló evidencia de 3.601 FCC presentes en humanos, lo que representa el 25% de los FCC conocidos. La docotra Birgit Geueke, coautora del estudio, enfatiza la importancia de este trabajo: "Nuestra investigación establece un vínculo entre las sustancias químicas en contacto con los alimentos, la exposición y la salud humana. Destaca aquellas sustancias químicas que se han pasado por alto en los estudios de biomonitoreo hasta ahora. Y destaca una importante oportunidad para la prevención y protección de la salud".
Se han detectado numerosos grupos de sustancias químicas, como bisfenoles, PFAS, ftalatos, metales y compuestos orgánicos volátiles, en muestras humanas y materiales en contacto con alimentos (FCM). Muchas de estas sustancias químicas tienen propiedades peligrosas que suscitan preocupación y se han relacionado con daños a la salud humana. La doctora Jane Muncke, otra coautora, expresa su preocupación por esta exposición generalizada: "Este trabajo pone de relieve el hecho de que los materiales en contacto con alimentos no son totalmente seguros, aunque cumplan con las normativas, porque transfieren sustancias químicas peligrosas conocidas a las personas. Nos gustaría que esta nueva base de pruebas se utilizara para mejorar la seguridad de los materiales en contacto con alimentos, tanto en términos de normativas como en el desarrollo de alternativas más seguras".
Sin embargo, en el caso de otras sustancias químicas que pasan del envase a los alimentos, como los antioxidantes sintéticos y los oligómeros, se sabe poco sobre su presencia y su destino en los seres humanos. La doctora Ksenia Groh, del Instituto Federal Suizo de Ciencia y Tecnología Acuáticas, comenta esta laguna de conocimiento: "Nuestro estudio pone de relieve que los antioxidantes, a pesar de su elevado volumen de producción y su uso generalizado en plásticos, están en gran medida ausentes de los programas de seguimiento. El conocimiento sobre el metabolismo, el destino y los efectos de estas sustancias es, por lo general, escaso".
Además, el estudio señala que los peligros potenciales de muchas sustancias químicas no se han investigado lo suficiente. Si bien los envases de alimentos no son la única fuente de exposición, los datos de este estudio mejorarán la comprensión de cómo los materiales en contacto con alimentos contribuyen a la exposición humana. Es probable que el número real de FCC presentes en humanos sea mayor que el detectado actualmente porque solo se investigó en detalle un subconjunto de FCC. El profesor Martin Scheringer, coautor de la ETH Zürich (Suiza), destaca la urgencia de abordar esta cuestión: "Sorprendentemente, se utilizan muchos productos químicos peligrosos en los materiales en contacto con alimentos y no solo se quedan allí, sino que muchos de ellos llegan, en cierta medida, al cuerpo humano. Esto es preocupante y claramente existe una necesidad de materiales en contacto con alimentos más seguros y simples".
Estos resultados tienen como objetivo ayudar a los investigadores a centrarse en lagunas importantes en nuestro conocimiento sobre la exposición humana a los FCC y comprender mejor los efectos de estas sustancias químicas en la salud. Como afirma el doctor Geueke, "Nuestra investigación ayuda a establecer el vínculo entre las sustancias químicas en contacto con los alimentos y la exposición humana, destaca las sustancias químicas que se pasan por alto en los estudios de biomonitoreo y respalda la investigación sobre materiales más seguros en contacto con los alimentos".
Se puede acceder y explorar fácilmente todos los datos en la base de datos complementaria sobre sustancias químicas en contacto con alimentos monitoreadas en humanos (FCChumon). FCChumon se basa en la base de datos de sustancias químicas en contacto con alimentos (FCCdb) y la base de datos sobre sustancias químicas migratorias y extraíbles en contacto con alimentos (FCCmigex) publicadas anteriormente. Este trabajo es parte del proyecto Sustancias químicas en contacto con alimentos y salud humana (FCCH).