MÉRIDA 23 Ene. (EUROPA PRESS) -
Las organizaciones agrarias Asaja Extremadura, APAG-Extremadura ASAJA y la Federación Extremeña de Caza se han posicionado en contra del proyecto Life Lupi Lynx, al considerar que la introducción del lobo ibérico de manera "artificial" en el norte de Extremadura y parte de Portugal es "tremendamente perjudicial" para la ganadería extensiva, la gestión cinegética y el mundo rural.
Estas entidades respaldan las declaraciones de la consejera de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Sostenible, Mercedes Morán, sobre esta iniciativa, de forma que comunicará la "salida del proyecto" o que la comunidad se centre "única y exclusivamente" en el proyecto Life sobre el lince.
ASAJA Extremadura, APAG-Extremadura ASAJA, y Federación Extremeña de Caza creen que este proyecto puede llegar a provocar "pérdidas millonarias, el abandono de la actividad y la desaparición de miles de empleos" en especial en sectores como la ganadería extensiva y la gestión cinegética.
Entre los argumentos esgrimidos para su posicionamiento en contra, señalan la publicación en 2023 del Censo del Lobo Ibérico en España, a cargo de la Fundación Artemisan, que señala que la especie "goza de la mejor situación de las últimas décadas".
En este censo se confirma que, sin necesidad de introducir "forzosamente" al lobo ibérico, la especie ha aumentado su población un 26% en los últimos 10 años, lo que ha provocado "un incremento impermisible de los ataques al ganado", señala Asaja Extremadura.
Así, indican que la pérdida de "cerca de medio millón de cabezas de ganado extensivo supone un 18,9% del total en España y la quiebra de muchas explotaciones".
Según los datos facilitados por las distintas comunidades autónomas "se producen más de 8.000 ataques a ganado extensivo, unos 22 ataques diarios, con 10.000 cabezas predadas, 27 al día, lo que supone un gasto anual de 3,5 millones de euros en compensación de daños y más de 4 millones de euros en medidas preventivas". Estas cifras económicas son "abrumadoras" y lo serán "aún más si este proyecto sale adelante", indican en una nota de prensa.
Además, argumentan que España ha sido un "ejemplo a seguir" para otros países en cuanto a la gestión y recuperación del lobo. El mayor incremento poblacional de la especie se produjo antes de su inclusión en el catálogo LESPRE, cuando el lobo se gestionaba cinegéticamente. Esto demuestra, que su caza "era y es positiva para mantener a esta especie controlada y con un buen estado de salud".
El Proyecto Life Lupi Lynx ha invertido 3,5 millones de euros "sin tener en cuenta los datos reales del lobo" en España y dejando "a un lado" a los actores involucrados en el mundo rural.
Para la organización agraria y la federación de caza, hay un "exceso de proteccionismo" que está generando "graves problemas de convivencia" y que "amenaza al mundo rural, e incluso a la propia supervivencia de la especie".
En este punto, se preguntan si son "reales" los propósitos de este proyecto, en tanto que el colectivo ecologista "pretende que se abandone la dehesa, la actividad del campo y que los animales tengan libertad sin control", aseguran, para alerta que con estas medidas "sin duda" España dejará de ser "la región mejor conservada de Europa".
En este sentido, subrayan que actualmente Extremadura goza de un "magnífico equilibrio" con tendencias estables en las especies de caza mayor, "gracias a la gestión cinegética". La introducción del lobo en el norte de Extremadura y parte de Portugal supondrá un "desequilibrio en un ecosistema absolutamente antropizado".
Por último, estas entidades remarcan que no están en contra de que la especie se expanda de "forma natural", pero esperan que la "introducción forzada del lobo en Extremadura no se llegue a producir jamás".